Lleva años en la primera línea de fútbol español. Pero el gran público ha puesto cara y nombre a Olga Carmona durante la Copa Mundial Femenina de Fútbol este pasado mes de agosto. Su brillante desempeño en el torneo, unido al hecho de ser la autora del gol que convirtió a España en campeona del torneo, ha multiplicado exponencialmente su exposición mediática. Todo, en un momento tremendamente agridulce para la defensa del Real Madrid. A la alegría de haber conseguido alzarse como campeona del fútbol se sumó una trágica noticia en lo personal: la pérdida de su padre, fallecido antes de la final del torneo tras un año enfermo.
Fue poco después de convertirse en campeona del mundo cuando esta futbolista sevillana de 23 años supo de la muerte de su padre. Su familia fue quien decidió no comunicar a la jugadora su fallecimiento para intentar que no afectase en su desempeño deportivo y en su concentración antes y durante el partido. Horas después de que la selección española se alzase con el trofeo la andaluza se pronunció en redes sociales para enviar unas palabras de cariño y recuerdo a su progenitor. "Y sin saberlo tenía mi estrella antes de que empezase el partido", escribía en su cuenta de Twitter. Su familia, que puedes conocer en detalle en el vídeo que encabeza esta noticia, ha estado muy presente en todas sus declaraciones desde la victoria.
Lo cierto es que la futbolista está tremendamente unida a los suyos. Su padre y su madre, sus dos hermanos y su abuela son un pilar fundamental en la vida de Olga. Tomás Carmona y Olga García, sus progenitores, llevaban años separados, desde que la futbolista era una niña, y ella estaba muy vinculada a los dos. Su padre, un empresario sevillano ligado también al mundo de fútbol, y que vivía en Málaga desde su separación, estaba tremendamente orgulloso de la brillante trayectoria de su hija. De hecho, después de su muerte trascendió que Tomás pudo ver todos los partidos de su hija en el campeonato, hasta su fallecimiento.
Su madre también es alguien fundamental en su vida. Esta conductora de autobuses sevillanos ha reconocido tener algún recelo inicial cuando Olga se decantó por el fútbol de pequeña, siguiendo además la tendencia familiar. "Yo me negué totalmente. Era la única niña y yo lo único que quería, con un pensamiento inculcado, era que hiciese otra cosa, otro deporte…", reflexionaba con humor su progenitora recientemente tras el éxito cosechado por su hija. Olga madre fue protagonista de una de las escenas virales de la celebración, abrazando a sus hijos.
Porque la deportista no es hija única: tiene dos hermanos veranos: uno es mayor que ella, Fran, y otro es su mellizo, Tomás. Como ella, ambos se dedican al fútbol profesional también y, como ella, son seguidores acérrimos del Sevilla FC, pasión que heredaron de sus padres. Fran, el primogénito, juega en CD Teruel como defensa, la misma posición de su hermana. El mellizo de Olga, Tomás, milita por su parte en las filas del UD Tomares como portero.
La familia más cercana de Carmona la completa su abuela materna, con la que mantiene un vínculo verdaderamente especial también. A ella, como a sus padres y a sus hermanos, los lleva consigo siempre cada vez que sale al césped: lleva todos sus nombres serigrafiados en una de sus espinilleras de la suerte.