Anna Ortiz y Andrés Iniesta, diez años después de la muerte de su hijo: "Gracias por recordarnos el significado de la vida"

Anna Ortiz y Andrés Iniesta vivieron hace diez años uno de los momentos más duros de su vida. La pareja perdió a su segundo hijo en el octavo mes de embarazo, una situación que - tal y como aseguró la propia interiorista - "fue una experiencia muy traumática" de la que durante años no se sintió con fuerzas para hablar. En mayo de 2021, la mujer del deportista sacó un libro en el que, bajo el título 'Mi luz', hablaba de las cosas "más personales" que le han pasado y que incluso nunca había llegado a hablar con su gente más cercana.

En una charla que mantuvo en directo en redes sociales con su marido, Anna Ortiz comentó que una de esas cosas era la pérdida de su bebé. "El hablarlo me producía más mal que bien y después de un trabajo personal que he realizado, finalmente me he visto con fuerzas para hacerlo público. Sentía que era el momento de sacarlo", comentó en aquel momento, justo antes de la publicación de su libro.

Ahora, cuando se cumplen diez años de la pérdida, el matrimonio ha recordado públicamente a su hijo. Tal y como puedes ver en el vídeo que encabeza esta noticia, Anna e Iniesta han compartido un mensaje para felicitar los diez años de su "trocito de cielo". "Gracias por cuidarnos y seguir recordándonos cada día el significado de la vida. Hoy es tu día y tus hermanos, hermanas, papá y mamá le soplaremos al tiempo pidiéndole nuestro deseo. Te queremos", ha escrito la interiorista. Además, en su pequeña carta ha añadido la palabra 'RAVAPASO', que está creada por la familia y une las iniciales de todos: Romeo (4 años), Andrés Iniesta (39 años), Valeria (12 años), Anna Ortiz (36 años), Paolo (9 años), Siena (6 años) y ahora Olympia (1 año).

La muerte de su hijo unió más a la pareja

En otra ocasión, la mujer de Andrés Iniesta compartió una carta en su cuenta de Instagram explicando cuánto les enseñó su hijo en esos ocho meses. "Ocho meses de amor incondicional, de esperanza e ilusión, pero también de miedos e incertidumbre. Junto a ti aprendimos que el camino nunca es fácil y que merece la pena todo el esfuerzo; aunque la tormenta cayera aquel 7 de marzo de 2014", escribió.

Anna confesaba que años después entendió que el camino de su hijo era ese y se sentía "aliviada y feliz" por ello. "A papá y mamá nos hiciste indestructibles y nos uniste más, gracias al inmenso amor que desprendes. Nos enseñaste lo que significa vida, a valorarla y disfrutar de ella", escribió.