Miguel Induráin posa con su mujer Marisa y sus hijos pequeños: así han crecido Jon y Ana

  • El ciclista, retirado del deporte desde hace más de dos décadas, ha evitado siempre que el foco mediático recaiga sobre su vida personal y familiar

  • Induráin y su mujer, Marisa López de Goicoechea, son padres de tres hijos: Miguel, Jon y Ana, y han posado con los dos pequeños en los Premios Laureus

  • Repasamos cuál es la vida actual de los hijos del deportista, que están desarrollando trayectorias vitales muy distintas entre sí

Hay apellidos que, con solo oírlos, no necesitan del nombre que les antecede para que el público sepa a quién nos referimos. Es el caso de Induráin, una de las grandes leyendas del deporte patrio y considerado el mejor ciclista español de todos los tiempos. Entre 1984 y 1996, el navarro desarrolló una espectacular trayectoria que sirvió, además, para poner de moda esta modalidad deportiva y enganchar a muchos espectadores. El lugar que ocupa en el imaginario colectivo es innegable, y todo ello, pese a que siempre se ha caracterizado por mantener un perfil discreto en cuanto a exposición mediática se refiere. Recientemente ha hecho una excepción posando junto a su mujer y sus dos hijos pequeños en los Premios Laureus 2024. Analizamos lo mucho que ha crecido su descendencia.

A diferencia de otras grandes leyendas deportivas, Miguel Induráin ha procurado siempre mantenerse alejado del foco mediático, centrado en sus negocios y la promoción de la actividad física, y evitar la exposición que otros deportistas sí han tenido tras retirarse. Esa despedida que anunció en enero de 1997 al público desde un hotel de Pamplona, y que, por entonces, solo conocían su club y su familia, de la que aseguró que le estaban "esperando". Un clan que también se ha mantenido lejos de la primera línea y en el que el ciclismo ha tenido un fuerte impacto.

Miguel Induráin reaparece y posa con su mujer y sus hijos pequeños

Durante sus años de carrera profesional, el de Villava estuvo siempre muy apoyado por los suyos. Ese entorno íntimo del que forman parte personas como Prudencio Induráin, uno de sus cuatro hermanos, que también se dedicó al ciclismo. O la familia que formó junto a su mujer, Marisa López de Goicoechea. El cinco veces campeón del Tour de Francia se casó en 1992, en pleno apogeo de su carrera, con la que había sido su novia de juventud. Marisa, como su marido, ha mantenido siempre una actitud discreta en lo mediático. El matrimonio tuvo tres hijos: Miguel, Jon y Ana. Y la pareja ha posado con los dos pequeños, Jon y Ana, en la mencionada alfombra roja de los que son considerados popularmente como los Oscar del deporte.

La vida actual de Miguel, Jon y Ana, los tres hijos de Induráin

No son demasiados los datos que se saben sobre la descendencia de Induráin. El mayor, que el próximo mes de diciembre cumplirá treinta años, es el más conocido de los tres, ya que, en cierto modo, siguió los pasos de su progenitor en el ciclismo, aunque de forma amateur, durante un tiempo, llegando a ser campeón de Navarra júnior. Finalmente, se bajó de la bicicleta para seguir en el mundillo pero de otra forma: emprendiendo con negocios vinculados con el ciclismo y el cicloturismo, proyectos de los que suele dar cuenta en sus redes sociales.

El mediano de la familia, Jon, optó por una trayectoria distinta, graduándose en Administración y Dirección de Empresas en Navarra en 2021. Actualmente, trabaja como auditor júnior en la prestigiosa KPMG. Nacido en 1998 (por lo que este año cumple los veintiséis), en su perfil de Instagram comparte algunas de sus aficiones, como su pasión por el mar, el deporte y los viajes.

Por su parte, la benjamina del clan, Ana, es graduada en Bioquímica y, según sus propias palabras, su vocación tiene mucho que ver con la investigación para afrontar desafíos de salud y poder mejorar la "calidad de vida" de las personas. Se trata del miembro más desconocido de la familia, ya que mantiene su cuenta de Instagram cerrada.