Sergio, el hijo mayor de Pilar Rubio y Sergio Ramos, ha celebrado su octavo cumpleaños. La pareja, que ha formado una familia numerosa con sus cuatro hijos, no han querido pasar por alto esta fecha tan especial y han organizado un cumpleaños en familia con tarta, dulces y una bonita decoración. Tanto el futbolista como la presentadora han escrito una emotiva carta a través de sus redes sociales en la que recalcan que han pasado ocho años desde que comenzaron "el camino más apasionante y la experiencia más maravillosas" de sus vidas, la de ser padres.
El que fue durante años capitán del Real Madrid utilizaba una fotografía de su hijo para contar a través de su cuenta de Instagram que "el tiempo pasa volando" y que sin darse cuenta tienen "un hombrecito de ocho años" en casa. En las palabras que han compartido, Sergio y Pilar coinciden en que ser el hermano mayor es "una responsabilidad y, a la vez, un privilegio". "Sé que eres el mejor ejemplo que tus hermanos podrían tener, porque con tu sonrisa y tu bondad nos alegras a diario. Sergio Jr, muchas felicidades. Siempre juntos. Te queremos con locura", han dicho públicamente. Los amigos de la pareja han confirmado las palabras dirigidas al mayor de sus cuatro hijos. Niña Pastori, íntima amiga del futbolista, aseguraba que Sergio Junior es "un niño muy bueno y muy noble".
La pareja ya tiene cuatro hijos. Máximo Adriano, el más pequeño, está a punto de cumplir dos años de vida. A pesar de que el día que salieron con él del hospital aseguraron ante las cámaras que ya habían hecho "demasiado por la natalidad" y que se plantaban en cuanto a la idea de ampliar aún más la familia, la presentadora ha dado una nueva entrevista en la que habla de sus planes de futuro.
"Si viene, viene; si no, pues nada", respondía en una charla con la revista Lecturas. Pilar Rubio considera que si lo que viene es "otro niño" sería "perfecto". "Estoy más acostumbrada a los niños. Creo que ahora con una niña no sabría qué hacer, sería todo nuevo otra vez”, respondía la mujer de Sergio Ramos, que deja así abierta la posibilidad de tener un hijo más y quitarse la espinita de tener a la niña.