La supercena 'fast' (y 'hard') de Lady Gaga antes de ir como una princesa de cuento a los Globos de Oro

Con el permiso de 'Bohemian Rapsdoy', la película sobre Queen que ha triunfado total en los Globos de Oro 2019, la otra película del año podría ser perfectamente 'Ha nacido una estrella'. Este tercer reboot de la cinta clásica protagonizada por Judy Garland nos ha regalado a una Lady Gaga en estado de gracia. Cuando se estrenó en esto de la interpretación con 'American Horror Story', muy pocos la tomaron en serio. A pesar de que se llevó el Golden Globe. Pero este musical dirigido por Bradley Cooper parece haberle dado a Gaga el reconocimiento de la crítica.

Muchos apostaban por ella como ganadora del Globo de Oro a Mejor actriz de drama. El premio finalmente fue para Glenn Close que, gracias a su papel en 'La buena esposa', subió al escenario a pronuniciar un discurso que ya es historia del feminismo. Pero Lady Gaga también tuvo su propio reconocimiento. 'Shallow', la canción original de 'Ha nacido una estrella', ya es un hit. Y fue la culpable de que la diva pop se fuese a casa con una estatuilla. Solo ella se podía emocioanar (tanto) al ganar uno de los premios más cantados de la noche.

Hablemos de moda. Si hay un acierto esta edición, ese es el Valentino de Lady Gaga. Nacho Montes, nuestro especialista en protocolo, lo ha definido en su blog como "un espectáculo". Y no es para menos. Era un homenaje al que llevó Judy Garland en la gala de 1954 por aquella versión de ‘A Star is Born’. Lo complementó con joyas de Tiffany's. No sin quitarle su toque excéntrico al ponerse el pelo a juego con el vestido. Para algunos, una princesa de cuento. Para otros, un guiño total al hada madrina de 'Shreck'. Lo que está claro es que con ella (valgan las obviedades) sí que 'ha nacido una estrella'.

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