Si el estreno de 'Içerde' demostró que esta es la nueva pasión turca de la que ya no nos podremos despegar, el triple capítulo de estreno ha servido para corroborarlo. En el primer episodio descubrimos a Sarp, un joven temerario e idealista que cree que infiltrándose en la organización criminal de Celal conseguirá la paz una vez logre desmantelarla. Pero el pasado le pesa. La supuesta muerte de su hermano le ha supuesto toda una vida de remordimientos. Hasta que, tal y como hemos podido ver en este último capítulo, descubra que todo este tiempo ha estado engañado.
Una caja misteriosa aparecida en casa de la madre de Sarp con las pertenencias personales de su padre hace reaparecer todos los fantasmas del pasado del policía. Su hermano pequeño, al que creía muerto, está vivo. Todo por una foto, la prueba que hace que los recuerdos de nuestro protagonista despierten de una vez por todas: "Umut está vivo".
"Acabaré con ese malnacido. He encontrado una foto de mi hermano que murió cuando tenía tres años. Al parecer le secuestraron". Ahora, Sarp tiene clara una cosa: no parará hasta que encuentre a su hermano vivo. Y de no ser así, su intención será dar con su tumba para comprobarlo con sus propios ojos. "Era un crío de tres años, ¿qué culpa tenía él?"