Blanca Romero sigue una estricta dieta. La modelo ha hecho un 'Question & Answer' ('Preguntas y Respuestas) a través de sus stories de Instagram en donde ha desvelado algunos de sus secretos de belleza, como la alimentación que lleva. "Me cuido y se nota", ha dicho tajante a sus más de doscientos mil seguidores de Instagram. La expareja de Cayetano Rivera, además, ha aprovechado la ocasión de abrirse en canal con sus followers para reconocer que, en este cambio de vida más saludable es una nueva Blanca y ha dejado de fumar y se ha puesto más labios (un tratamiento que se ha hecho por segunda vez en su vida).
La maniquí de Asturias siempre ha mostrado en su perfil público que practica mucho deporte -además de cuidar su alimentación-. "Me gusta hacer deporte en el mar que aparte de curativo, es muy sano y ayuda también a mi mente, me encanta nadar en agua fría para activar mi circulación", confesó en una entrevista en la revista 'Telva', en la que añadió que su mantra, en esta vida saludable, es no "sufrir" a la hora de hacer ejercicios: "Mi filosofía es que sufrir por estar bien, ¡no! A veces, el cuerpo te pide tirarte en el sofá y hay que dárselo y aceptarte y aunque tengas unos kilos de más hay que concederse esos caprichos y recreos".
Si hay un valor que destaca siempre Romero es el amor propio. En esta misma cabecera, dejó claro que es muy importante no sacarnos defectos: "Creo que hay que hacerse menos caso del que nos hacemos a veces. Porque al mirarnos, nos sacamos más defectos y si te ves de refilón, te sorprendes, así que yo creo que hay que mirarse con cariño".
En este estilo de vida, hay una disciplina que la madre de Lucía Rivera lleva a rajatabla. Precisamente, en las últimas horas -en este 'Preguntas y Respuestas'- ha asegurado que lo que intenta hacer es "ayuno intermitente", que consiste en limitar la ingesta de alimentos durante el día y hacerlo de manera puntual.
Sin embargo, no es un estilo de vida que siempre ha seguido la actriz. "Yo de joven no me cuidaba ni era nada presumida", confesó en una entrevista a Europa Press: "Ahora no tomo alcohol, no tomo harina ni azúcares. Esto me ayuda a mantenerme, aunque creo firmemente que cada año ponemos dos kilos que son difíciles de eliminar".