Marta Peñate se toma "las pastillas" para expulsar el embrión: "Había posibilidad de perforación del útero"

El pasado 5 de junio, un mes después de conocer que estaba embarazada de su primer hijo junto a Tony Spina, Marta Peñate contaba públicamente que había perdido al bebé. La pareja emitió un comunicado conjunto en el que explicaban que Marta tuvo "un leve manchado" por el que decidieron ir al hospital y conocieron que el embrión "no tenía latido". "Esto ha sido uno de los mayores batacazos de nuestra vida", aseguraron en aquel momento.

La influencer y su pareja reaparecieron unos días después en el programa '¡De Viernes!', tal y como puedes ver en este vídeo, contando el duro proceso por el que estaban pasando y asegurando que volverían a intentar ser padres pero sin hacerlo público, ya que así evitaban el doble dolor de tener que dar explicaciones. Estos últimos días los han pasado juntos en un lujoso hotel, disfrutando de unas vacaciones y desconectando. A la vuelta de vacaciones, Marta Peñate contaba en su cuenta de Instagram que no había expulsado el embrión de manera natural y que tenía que someterse a un nuevo tratamiento para ello. Se abrían entonces dos opciones: un legrado o las pastillas, un tema sobre el que quiso pedir opinión.

"Estoy yendo al hospital para ver qué hago y tenía claro que quería hacerme un legrado, pero no estoy segura de tomarme las pastillas abortivas a pesar de que me habéis dicho muchas que es un parto. Se que el legrado puede tener alguna consecuencia, que es difícil, pero como soy el bajo porcentaje de todo, no sé. ¿Qué me recomendáis? Tengo un dilema increíble", comentaba en sus redes sociales este pasado martes 17 de junio.

Marta Peñate se toma las pastillas abortivas tras no expulsar el embrión de manera natural

El legrado es un procedimiento ginecológico en el que se aspiran las paredes internas del útero para extraer tejido endometrial o restos de embarazo. Por otro lado, las pastillas inducen al parto para eliminar de esa forma los restos del embarazo. Marta, que acudía este pasado martes al hospital, llevaba convencida de que iba a someterse a un legrado, pero la profesional con la que lleva su caso le recomendaba tomarse las pastillas. "Se que estas pastillas pueden doler, pero en el legrado, en tu caso, hay una posibilidad más alta de que se perforare el útero", le explicaron a la influencer.

Una vez en casa, Peñate contó que se había tomado las pastillas y que tres o cuatro horas después empezarían las contracciones para expulsar el embrión. "Me ha surtido de medicamentos para el dolor. Si no sabéis de mí en el día de hoy es que me estaré retorciendo del dolor. Voy a rezar, pero yo voy a tener suerte. Estoy cagada", aseguraba en sus redes sociales.