Claudia Rodríguez, mujer de Marc Cucurella, cuenta cómo afrontan que su hijo Mateo, de cinco años y con autismo, no pueda hablar

Claudia Rodríguez, mujer de Marc Cucurella, es la nueva protagonista de 'Madres: Desde el corazón', el programa de Mediaset Infinity en el que exploran la maternidad
La mujer del futbolista, que tiene 25 años, se sincera sobre el cuidado de su hijo Mateo, que tiene cinco años y autismo
Claudia Rodríguez, que tiene 25 años, y Marc Cucurella, que tiene 26 años, son del mismo pueblo, Mataró, pero comenzaron a hablar a través de las redes sociales hace siete años. Ella le vio en una fotografía de un amigo y empezaron a seguirse en Instagram. "Me escribió y empezamos a conocernos", cuenta la joven, que es la protagonista del nuevo capítulo de 'Madres: desde el corazón'. A pesar de su juventud, Claudia tenía 20 años cuando decidió, junto al futbolista, que querían ser padres jóvenes para disfrutar todo lo que pudieran de sus hijos. "Recuerdo que hicimos juntos el test de embarazo, salió positivo y muy contentos. Es muy especial el primero y tienes todo el tiempo para volcarte en ese embarazo. Cualquier mínima tontería es una ilusión. Mateo nació en Madrid", recuerda sobre el nacimiento de su primer hijo, que actualmente tiene cinco años.

La pareja se dio cuenta del autismo de su hijo antes del diagnóstico
El menor tenía trece meses cuando sus padres comenzaron a notar en él "diferencias" respecto al resto de niños de la escuela infantil. "Yo notaba diferencias de no tener contacto visual, le veía muy pasota, no respondía al nombre, no prestaba mucha atención... En su día no hubiese pensado que era autismo", recuerda sobre los motivos que les llevaron a contar con la opinión de un experto. Una de las cosas más importantes para ellos era que su hijo no hablaba. "Era el mayor indicativo, pero el pediatra me decía que podía pasar, que había niños que aprendían a hablar más tarde. También le operaron de los oídos y eso podía ser un motivo, pero las pruebas siempre han salido bien, no era un problema de oído. Es autista y agradecemos habernos dado cuenta, pero me hubiese gustado saberlo antes", cuenta Claudia en esta charla con Cruz Sánchez de Lara.

Claudia ha explicado que se dio cuenta de que su hijo tenía trastorno del espectro autista antes de recibir un diagnóstico. "Le apunté a un colegio en Londres y ya no se podía soportar la situación. En el colegio no tenían herramientas para ayudarle. Me busqué un colegio de terapia para niños autistas y le llevé sin un diagnóstico. Mateo no está preparado para recibir una educación normal, necesita uno para uno y aprender otras cosas. Nos fue muy bien la terapia que estuvo haciendo en ese colegio. Pudimos aprender cosas como usar el baño, flexibilidad con sus rutinas, ahora seguimos preparándolo para que pueda incorporarse a un colegio normal. Pero ahora mismo sería perder el tiempo", cuenta sobre la educación que le dan actualmente.

Así afrontan que su hijo Mateo, de cinco años, no hable
La mujer de Marc Cucurella, tal y como ha contado en el programa, considera "muy difícil" de llevar que su hijo no hable porque la comunicación "es primordial con cualquier persona". Según ha explicado, el matrimonio está "luchando por ello" y Claudia intenta comprenderle "lo máximo" que puede. "No entendemos a la perfección y no habla, pero ha llegado un punto en el que él necesita hablar", comenta.
Claudia dice que es "otra persona" desde que le diagnosticaron autismo a su hijo. "Te enseña muchísimo, ves la vida diferente. Siempre he sido muy empática pero, si se puede más, ahora lo soy mucho más. Pienso que pueda tener su vida, ser autónomo y algo que le haga disfrutar, que le haga feliz", dice sobre el futuro del menor.
La terapia que sigue Mateo, el hijo de Claudia y Marc
La mujer del futbolista cuenta que acaba de volver de Argentina de visitar a un neurólogo y que está buscando esa terapia "cerca de casa". La pareja vive desde hace cuatro años en Inglaterra y se han cambiado de casa par estar más cerca del colegio de Mateo, que es en el que está desarrollando una educación concreta. "Ahora nos necesita y necesita eso", asegura. Aunque la residencia final de la familia será España porque como su país "no hay nada", Claudia sí asegura que le gusta mucho la educación que sus tres hijos están recibiendo en Inglaterra y que se sienten "muy adaptados".
