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Las tardes de otoño y los fines de semana invitan muchas veces a quedarse en casa. Pero cuando tienes niños es conveniente tener siempre ideas a mano que les garanticen ratos de entretenimiento. Y pocas cosas hay más acertadas que las manualidades, porque además de gustarles a todos los niños, les ayudan a desarrollar su creatividad. Aprovecha las hojas y frutos propios de esta estación para hacer estas manualidades sencillas con tus hijos. ¡Les encantarán!
Los paseos por el parque son perfectos para llenaros los bolsillos de castañas y utilizarlas en casa en diferentes manualidades. Estos erizos, por ejemplo, son muy fáciles de hacer, y si cuentan con castañas de diferentes tamaños, podréis hacer una familia completa. Solo necesitas un pincel y pintura blanca para dibujar la cara y las púas. Si, además, reúnes hojas, podrán utilizarlas como camas para los erizos.
Seguimos con los erizos, pero con una manualidad perfecta para niños más pequeños. Les puedes ayudar haciendo el cuerpo del erizo en una cartulina, y ellos solo tendrán que pegar las hojas como si fueran las púas del animal. Podéis añadir las patas en último lugar, para conseguir unos erizos tan bonitos como estos.
Esta manualidad les gusta a los niños de todas las edades, y consiste en utilizar hojas de diferentes árboles, con diferentes tamaños y colores, para hacer diferentes caras sonrientes con un pelo muy original y divertido. Los niños más pequeños pueden pegar las hojas sobre las cabezas ya dibujadas, y los más mayores pueden hacer las caras cómo más les apetezca.
Las piñas son otro tesoro que puedes encontrar en la mayoría de parques. Pintarlas de diferentes colores ya es una actividad divertida, pero lo es aún más hacer unas ardillas como esta y ponerlas a modo de cola. Para el cuerpo solo necesitas el cartón de rollos de papel higiénico, y si tienes una bellota para poner entre sus manitas, será ideal.
Pocas manualidades encontrarás como esta de bonita y sencilla. Las hojas son las faldas de bailarinas que danzan al son de la música otoñal, y a las que puedes dibujar con trazos muy sencillos. Aprovecha para hacerlas escuchando canciones que hablen de esta estación, y parecerá que se mueven al son de la música.
El otoño está repleto de leyendas en las que los bosques se llenan de hadas y duendes. Lleva esta magia a tu casa y haz que tus hijos participen de ella creando haditas así de bonitas. Lo esencial es contar con el cartón de un rollo de papel y una piña para hacer el cabello del hada. La falda de colores podéis hacerla con tiras de papel, pintar la cara con rotuladores y acuarelas, y añadir pequeñas flores de adorno.