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Laura Escanes considera que ser madre es "lo más heavy" que ha hecho y hará en la vida. Así lo ha explicado ella misma en una entrevista que ha concedido en el podcast Club 113, presentado por Goorgo, Nil Ojeda y Werlyb. La influencer experimentó la maternidad hace tres años con el nacimiento de su hija Roma, la menor que tiene en común con Risto Mejide, de quién se separaba hace algo más de un mes tras siete años juntos. "No sé si voy a volver a ser madre o no. Yo siempre había querido ser madre, tampoco pensaba cuando, pero lo que he vivido y vivo todos los días no se puede explicar", ha comenzado diciendo.
La influencer reconoce que también "es muy duro" y que lo ha pasado "muy mal" en varias ocasiones. La catalana dice haber tenido "muchos miedos" y que desde que nació Roma ya no solo piensa en ella misma, si no que se plantea que todo lo que haga o diga puede afectar a su hija. "Me castigo mucho. Nadie te enseña a ser madre, si la cagas la estás cagando con lo que más te importa del mundo. Alguien me dijo que cuando eres madre es como una olla a presión, que en cualquier momento puede explotar. Es esa sensación. No sabes si lo haces bien, mal, o qué necesita", dice sobre la maternidad.
Laura Escanes ha hecho una reflexión sobre lo que pueden necesitar los menores y lo ha comparado con lo que ella vivió cuando sus padres se separaron. "A todos nos ha pasado. Cuando crecemos decimos: 'joder'. Cuando mis padres se separaban yo pensé que necesitaba otra cosa, pero ellos están en su movida. Tampoco les puedes transmitir que es lo que tú necesitas si ellos están pasándolo mal", dice sobre cómo lo vivió. Una situación que ahora le toca atravesar siendo madre, ya que anunció su separación con el padre de su hija hace poco más de un mes: "Mi única preocupación es que sea feliz".
Esa es la etapa que más miedo le da a la hora de educar a la menor, pero considera que actualmente, que tiene tres años, está formándo su personalidad y tampoco es fácil. "Tiene ya carácter, hay que marcar unos límites", asegura la influencer. Tal y como contaron en más de una ocasión, la catalana hizo "cursos de todo" cuando nació su hija Roma porque quería estar preparada para todas las decisiones que hay que tomar sobre los cuidados de un bebé, algo que sigue haciendo actualmente.
La influencer quería que su hija fuese a un colegio laico, mixto y, a poder ser, bilingüe. Estas son algunas de las cosas que ha encontrado en el colegio en el que está actualmente, pero considera que encontrar las cosas "perfectas" para los hijos es algo "muy difícil". Igual que delegar. "A mí me costó mucho. Cuando nació mi mundo era ella, tenía las redes pero casi no trabajaba. Me costaba incluso con su padre. Hay que aprender que no todo el mundo lo hace de tu manera, evidentemente tenemos que ir de la mano en cosas básicas, pero cada uno tiene su papel", reflexiona ahora.
Desde antes de su nacimiento ya tenían claro que no mostrarían su rostro en redes sociales. La influencer y el presentador de 'Todo es mentira' quisieron "proteger" la identidad de su hija Roma para que ella misma pueda elegir cuando sea mayor de edad. "Creo que lo hago de una forma natural, no puedo hacer como si no existiera porque mi mundo es ella. No publicar una foto en su cumpleaños es raro porque mi vida es ella, pero quiero protegerla un poco", explica Escanes.
Si hay algo que le molesta a la pareja es que algunos fotógrafos pillen a su hija a pesar de tener que pixelarla para poder publicar fotos de ella. "Todo esto a mí me afectaba a nivel personal. Por eso, las primeras semanas (dice en referencia a cuando anunciaron su separación) que estaban en la puerta, no quería salir con ella por la puerta de mi casa. Ella ya pregunta, yo no tengo que tener conversaciones con mi hija de por qué me hacen fotos. Un niño de tres años no puede vivir eso, ni preguntarlo", ha dicho.