Pilar Rubio, muy exigente con sus hijos: "Si quieren dinero, tendrán que trabajar"

  • Sergio Ramos y Pilar Rubio llevan más de quince años juntos y tienen cuatro hijos en común

  • La presentadora, en una charla con Laura Escanes, ha desvelado las claves de la educación de sus hijos con el futbolista

  • "Yo lo que quiero es que vean que las cosas cuestan mucho. Yo no les doy paga ni nada, son niños pequeños", ha contado

Sergio Ramos ha comentado en más de una ocasión que su relación con Pilar Rubio surgió gracias a un sueño. Era el año 2008, durante unas vacaciones en Sevilla, cuando el futbolista pensó que tenía que intentar algo con la presentadora después de que se apareciese "hasta tres veces" en sus sueños. Se animó, consiguió su número de telefono y le escribió un Whatsapp. "Empezamos a hablar, nos conocimos y ahí empezó una historia de amor y una historia familiar", contó el sevillano. Ahora, quince años después de aquella iniciativa, el deportista y la presentadora llevan cuatro años casados, tienen una vida familiar entre Madrid y París y cuatro hijos en común: Sergio, Marco, Alejandro y Máximo Adriano.

En una charla con Laura Escanes en su podcast 'Entre el cielo y las nubes', Pilar Rubio ha hablado abiertamente de la educación de sus cuatro hijos. La presentadora tiene claro que sus hijos no son conscientes de la fama de sus padres porque "no han vivido otra cosa, lo ven como normal". "Son niños, van al cole con sus amigos y tampoco juegan mucho al fútbol", ha explicado.

Valor, sacrificio y trabajo, pilares fundamentales en su educación

Sin embargo, la presentadora ha puesto un ejemplo de una vivencia que le ha ocurrido con Sergio, su hijo mayor que tiene ocho años. "Mi hijo a veces me viene y me dice: 'Es que no sé quien tiene un móvil, yo quiero uno'. Y yo le digo: 'Pero tú dónde vas, chaval'. Yo me compré un móvil para trabajar cuando tenía dinero. Tú cuando tengas dinero te lo compras. Hasta los 18 o los 16 no creo que lo tengas. Si vas a casa de un amigo yo llamo a su madre, no te preocupes", ha relatado sobre una de las peticiones del menor.

Pilar Rubio intenta que sus cuatro hijos "valoren las cosas" y ven "que cuestan mucho". "Su padre es un trabajador nato, su madre también. Yo no les doy paga ni nada, son niños pequeños. Si quieren dinero, les digo: 'Vale, pues tendrás que trabajar'", explica la presentadora, que les manda "cepillar a los perros", "ayudar a lavar el coche" u ordenar su cuarto. "Mi padre me ponía a limpiar los cristales de la tienda que teníamos todos los sábados. Venimos de familias supernormales, lo único que hemos hecho es currar, ya está (...) Tienen mucha consciencia del esfuerzo y el sacrificio. No les dejo que se dejen nada en el plato, papá y mamá han estado trabajando para que lo tengas y te lo tienes que comer. No tengo mucha paciencia", dice la mujer de Ramos.

Sergio Ramos también habló de la educación de sus cuatro hijos

Fue hace unos meses, en una entrevista a la revista GQ, cuando el futbolista explicó que pasó su infancia en un barrio sevillano, "muy cerca del campo", y estaba todo el día "haciendo arcos y tirando flechas". "Era todo un poco más salvaje que ahora, pero también era algo que te acerca más a la realidad", aseguró echando la vista atrás. El jugador de fútbol explicó que él era "de muñecos, bicicleta y balón de fútbol" y no quiere que "tanta tecnología como hay ahora" perjudique a sus hijos en la educación.

El sevillano explicó que considera que sus hijos "no son conscientes" de cómo vivió su padre cuando tenía ocho años - edad que ya ha alcanzado el mayor de sus cuatro hijos -. "Mis hijos son muy pequeños, aunque con Sergio ya empezamos a tener conversaciones de persona mayor. Mis hijos están creciendo en otra sociedad", decía el deportista. Ramos cree que hay "una evolución" muy grande a nivel educativo que tiene "sus pros y sus contras". Cuando él era pequeño formaba parte de una familia "humilde" a los que nunca les faltó para comer. "Afortunadamente yo les puedo dar una vida y una educación muy buenas. Ahora podemos elegir el colegio de los niños, pero no quiero que pierdan la perspectiva de dónde venimos y que al final, en la vida es necesario hacer un esfuerzo muy grande para conseguir las cosas", dijo coincidiendo con las palabras que ahora ha usado su mujer.