Malú o Laura Escanes: famosos a los que la llegada de sus hijos les ha afectado como pareja

"Muchas veces también los hijos desunen más que unen", nos decía en exclusiva Tomás Páramo en el micrófono de Divinity. No es su caso con María García de Jaime, con la que tiene tres hijos: Tomás Jr., Catalina y Federico, ya que siguen felizmente casados y con proyectos de futuro. El 2023 ha sido un año marcado por varias rupturas mediáticas, como la de Malú y Albert Rivera. Aunque en un principio desconocíamos qué había detrás de algunas de las separaciones más sonadas de la temporada, sus protagonistas han ido dejando pistas de cuál es el verdadero motivo de la decisión de emprender caminos por separados.

Malú siempre ha sido muy hermética a la hora de hablar sobre su vida privada. Cuando comenzó su relación con el expolítico, muy pocos apostaban por que fuera un amor estable y duradero. Sin embargo, fruto de su historia nacía Lucía, su hija en común. A través de sus redes sociales, la artista y el abogado anunciaban la llegada de su bebé (la primera de la sobrina de Paco de Lucía y la segunda de Rivera). Una noticia que cambiaría sus vidas para siempre y por la que a día de hoy, a pesar de haber puesto punto y final a su idilio, siguen unidos.

Meses después de sus sonada ruptura -a comienzos del verano del 2023 y tras unas imágenes del expolítico con otra mujer que no era Malú-, la intérprete de Blanco y Negro, que cumple 25 años en su profesión, desvelaba que, efectivamente, los hijos pueden ser un motivo de ruptura en una pareja. Concretamente, fue en 'Viajando con Chester', el programa que conduce Risto Mejide en Cuatro, donde afirmó que en muchas ocasiones la llegada de descendientes pueden desunir en una relación: "Yo creo que sí, planteado como lo bueno y lo malo. También creo que separa mucho si las dos personas no están en el mismo sitio. Crea un mundo". ¿Habrá sido esta la verdadera razón de su separación?

A finales del pasado año, Laura Escanes y Risto Mejide anunciaban su ruptura tras siete años de amor y una hija en común. Desde el primer momento, la expareja dejaba clara cuál era su mayor prioridad: Roma. "Han sido siete años maravillosos. También duros. Pero ha sido un regalo compartir mi vida contigo. El amor no se acaba. No muere. Y te seguiré queriendo el resto de mis días. Si tenía que vivir todo esto y conocer lo que es el amor, tenía que ser contigo. Me imaginé la vida entera contigo y me has hecho creer en la eternidad", rezaba el comunicado de la influencer.

En un primer momento, ambos optaron por el silencio a la hora de hablar sobre las causas que llevaron al final de su matrimonio. Sin embargo la catalana, tras su sonada ruptura con el cantante Álvaro de Luna, se abría en canal hace unas semanas en su podcast en donde desveló que el motivo de su separación con el presentador, muy similar al de Malú con Albert: "Yo era muy feliz, pero llegó un momento que no nos hacíamos felices, ni yo a él ni él a mí. Creo que la diferencia de edad no es un problema si estás en el mismo momento vital. Creo que no es la diferencia sino el momento vital. ¿Qué pasa? Que la diferencia de edad y el momento vital están muy relacionados".

Por su parte, también acudía a sus stories de Instagram en una noche de insomnio para hacer una reflexión sobre cómo se sentía en un año de cambios. Además, aprovechó para lanzar un dardo a su última pareja y que tiene relación con su hija Roma: "Es mucha carga y no le corresponde, o porque se le hace grande. Porque tal vez es mejor con alguien que no haya tenido hijos previamente, porque ya vengo quemada... yo que sé. Y lo entiendo".

Tomás Páramo y María García de Jaime también abordaron este asunto. Tras pasar por el altar en 2019 y tres hijos en común, el matrimonio desvelaba en sus redes sociales que este pasado verano atravesaron por una crisis que, afortunadamente, pudieron solucionar. Sin embargo, era el propio empresario el que en los micrófonos de Divinity, y tras mencionar la crisis entre María Pombo y Pablo Castellano (motivada también por los cambios que han vivido este año) reconocía que, "a veces, los hijos desunen más que unen".