Enuresis nocturna o hasta qué edad es normal que los niños se hagan pis por la noche

  • La enuresis nocturna en niños y adolescentes hace referencia a la repetida emisión de orina de manera involuntaria.

  • Esta complicación suele afectar, en la mayoría de casos, a los varones y a los menores de seis años. Además, irá desapareciendo con el paso del tiempo.

La enuresis nocturna en niños y adolescentes se trata de la emisión repetida de orina de manera involuntaria durante todo el día o por la noche en el momento de dormir, en la cama. Para que sea considerada una enfermedad debe darse, por lo menos, dos veces cada día durante un mínimo de tres meses consecutivos y en niños mayores de cuatro años. Se suele dar mucho más en varones, a partir de los cinco años, y aparece con más frecuencia en la noche. La enuresis no suele desencadenarse por otra enfermedad o complicación o por la toma de sustancias como los diuréticos. La Asociación Española de Pediatría apunta que no se han realizado muchos estudios sobre este tema, aunque sí que es cierto que afecta a una buena cantidad de niños.

Por qué se produce la enuresis

Sí que es cierto que la incidencia se va reduciendo según el niño va siendo más mayor. Se estima que, en la actualidad, existen casi medio millón de niños que sufren esta complicación y que afecta a poco más del diez por ciento de los niños de seis años y al seis u ocho por ciento de los pequeños de diez años. La enuresis nocturna tiene una causa clara y se produce cuando el niño está profundamente dormido y no se despierta cuando su vejiga está llena y debe vaciarla. En la mayoría de los casos, se trata de una patología hereditaria, por lo que, si alguno de los progenitores ha sufrido de esta enfermedad durante su infancia, es muy probable que a su hijo le pase lo mismo.

Otra causa puede ser la alteración del sueño, ya que puede ser que los niños no hayan aprendido a controlar la micción durante los primeros años de vida o, también, como resultado de cualquier otra patología. Las situaciones de continuado estrés también pueden provocar la aparición de la enuresis. Estos momentos complicados pueden ser la separación de los padres, el fallecimiento de un familiar, el cambio de residencia, el nacimiento de un hermano, ante abusos sexuales u hospitalizaciones. Por eso, tendremos que estar pendientes de los grandes cambios que se pueden producir en la vida del niño y que pueden afectarle, aunque sea de forma indirecta. También, los niños que viven en hogares desestructurados o con problemas económicos tendrán más posibilidades.

Sus síntomas

El principal síntoma de la enuresis es la pérdida de orina de forma involuntaria. Esta puede darse varias veces por la noche, es en este momento del día cuando son más abundantes. En algunos niños que sufran esta enfermedad se pueden dar problemas para despertarse y estreñimiento. La mejor forma de prevenir ante la enuresis es educar al niño a controlar bien la micción durante los primeros años de aprendizaje. Esta etapa será fundamental para que asimile estos conceptos tan básicos. Los expertos recomiendan que se vaya fijando la frecuencia con la que tienen que acudir al baño y no levantarle por la noche si no lo desea. Otra recomendación será no retirar el pañal hasta los 24 meses ni alargar el uso más allá de los tres años.

Los tipos de enuresis y cómo se diagnostica

La Asociación Española de Pediatría clasifica esta afección en tres tipos. La enuresis puede ser nocturna, si la emisión de la orina se produce solamente durante la noche; diurna, si la micción involuntaria ocurre durante las horas de vigilia y diurna, si es una combinación de ambas. Además, se distinguen otros dos tipos, como, por ejemplo, la enuresis primaria, que ocurre cuando el niño nunca ha sido capaz de contener la orina. Esta es más frecuente en el sexo masculino y suele disminuir según se va cumpliendo años. La enuresis secundaria hace referencia a un periodo de continencia, de unos seis meses o un año, y posteriormente ha tenido una recaída que se prolonga hasta los seis meses.

Para diagnosticar la enuresis, lo primero que habrá que hacer será una entrevista clínica al paciente. A continuación, el especialista podrá requerir una prueba de orina y un urocultivo para confirmar la infección de orina. En un gran porcentaje de niños, la enuresis desaparece de forma espontánea antes de los seis años de edad y si no desaparece, habrá que contactar con un profesional que trate los problemas del niño. El mejor tratamiento será que el niño siga unas rutinas como miccionar antes de ir a la cama y no beber líquidos unas dos o tres horas antes de acostarse.