Eyaculación precoz: una especialista aconseja cómo afrontar la situación en pareja

  • La eyaculació precoz es una disfunción sexual masculina que afecta al hombre y, por ende, puede llegar a perjudicar su relación de pareja.

  • Se convertirá en un verdadero problema para la pareja, ya que el hombre sentirá ansiedad, vergüenza y evitará mantener relaciones sexuales.

La eyaculación precoz puede afectar al hombre en cualquier etapa de su vida y, sobre todo, es causada por la presión que ejerce la propia persona sobre sí misma, al pensar que no va a estar a la altura. Se trata de una disfunción sexual masculina que es muy frecuente y se caracteriza por la falta de control voluntario sobre la eyaculación. Por ello, el hombre eyacula de manera prematura y antes de lo que desearía, cuando está manteniendo relaciones sexuales. Se trata de un problema bastante común y afecta a un hombre de cada tres, que afirman haberlo sufrido alguna vez en su vida.

Podemos encontrarnos distintos tipos de eyaculación precoz; la primaria, cuando el hombre nunca ha tenido el control de su eyaculación y, secundaria, que se da cuando sí que la ha tenido, pero, con el paso del tiempo, la ha perdido. Este problema suele afectar de forma muy negativa al estado psicológico de la persona y, también, a la calidad de la vida sexual. “Es difícil generalizar porque cada hombre tendrá su propia reacción personal, pero sí podríamos decir que cuando un hombre eyacula antes de lo deseado su reacción suele ser de preocupación por si debido a su rápida eyaculación su pareja sexual no se ha quedado satisfecha en dicho encuentro erótico o de justificarse con que es la primera vez que les pasa y que es porque están nerviosos. Suelen tener bastante miedo a esta situación”, explica Sonia García, psicóloga y sexóloga a Divinity.es.

“El hombre sentirá ansiedad, vergüenza, frustración y tenderá a evitar los encuentros sexuales para que no se produzca esta eyaculación precoz”, puntualiza Ruth González Ousset, sexóloga, psicoterapeuta y terapeuta de pareja a este portal.

La eyaculación precoz, muy común en los hombres

Por ende, también afectará a su pareja, ya que no se conseguirán relaciones sexuales satisfactorias y generará un profundo malestar. Sí que es cierto que no existe un prototipo claro de un hombre que pueda sufrir esta complicación, por lo que puede afectar a cualquiera y en cualquier momento de la vida. “El tema de "durar" en el sexo les preocupa tanto como el conseguir erecciones. Existe el mito de que el hombre tiene que tener siempre ganas de sexo, tener siempre erecciones (y además potentes) y aguantar mucho tiempo durante la penetración antes de eyacular", añade la especialista.

“La mejor manera de ayudarle será acudir con él a un sexólogo o a terapia de pareja y, sobre todo, ver el origen; cuando alguien sufre eyaculación precoz es que su cuerpo está hablando”, puntualiza Ruth González Ousset, sexóloga, psicoterapeuta y terapeuta de pareja. Las causas de la eyaculación precoz son variadas y puede deberse tanto a factores orgánicos como psicológicas. Las principales causas psicológicas hacen referencia a un mal aprendizaje del control de la eyaculación, la ansiedad y el estrés asociado a las prácticas sexuales y su rendimiento. No todos los hombres que sufren de eyaculación precoz deciden tratar el problema, aunque esto será lo más efectivo.

La terapia sexual intentará controlar esa ansiedad en el rendimiento sexual y se basará en el reaprendizaje del control del reflejo eyaculatorio, aprendiendo técnicas de focalización sensorial y bloqueo. También, si la persona tiene ansiedad, lo mejor será tratar este extremo. Durante el tratamiento, la terapeuta marcará una serie de ejercicios y tareas para realizar en casa en solitario o en pareja. “Estos ejercicios siempre serán recomendados por un profesional en pareja y, también, de manera individual. Además, será muy importante fortalecer la musculatura pélvica, algo que será totalmente necesario”, explica Ruth González Ousset, sexóloga, psicoterapeuta y terapeuta de pareja.

Cómo afectará a la pareja

Como ya hemos comentado, la eyaculación precoz es un problema que podrá afectar a la relación de pareja, que derivará en una mala comunicación y en problemas fuera del acto sexual. “La reacción de la pareja suele ser la de dar normalidad a lo ocurrido y de no preocuparse por el tema. Si la rápida eyaculación se convierte en algo habitual entonces la pareja sí puede verse directamente afectada y animarle a buscar solución al problema, pues probablemente esté afectando a la vida en pareja”, explica Sonia García, psicóloga y sexóloga.

Porque además de ser un tema complicado para el hombre, también lo será para su pareja, que puede no saber cómo abordar el tema. “Lo que no deberíamos decir nunca en estos casos son mensajes del tipo: 'No me has satisfecho', 'Qué poco hombre eres' o perlas semejantes. Solo conseguirán generar presión en el hombre y dañar su autoestima”, añade la experta. “Si no se trata bien puede desencadenar que no hay ningún encuentro sexual y se evita, sobre todo por parte del hombre, que no quiere enfrentarse a eso”, apunta Ruth González Ousset, sexóloga, psicoterapeuta y terapeuta de pareja.

Cómo superarlo

Por ello, Sonia García recomienda que el tema en pareja se trate con total naturalidad. “El sexo es una parte más de nosotros y las dificultades sexuales pueden existir. De hecho, son mucho más frecuentes de lo que podemos imaginar. Es más, la pareja puede participar en el proceso terapéutico”, apostilla. Además, como hemos comentado, existen diversos ejercicios y recursos terapéuticos para que el hombre adquiera el control de su vida sexual: “pero será fundamental trabajar los mitos, miedos, recuerdos y demás pensamientos que generan ansiedad y, por tanto, que provocan que se dispare la eyaculación antes de lo deseado”.

“Habrá que desaprender lo aprendido; el pensar que un hombre cuanto más aguanta, de más calidad son sus relaciones sexuales. Esto es erróneo; hay muchos hombres que solo les sucede cuando tienen relaciones con penetración”, aconseja Ruth González Ousset. “Se podrán probar otros juegos sexuales sin penetración y disfrutar de la sexualidad de una forma diferente a la que nos han enseñado”, añade la especialista.

La pregunta que se harán muchos hombres es cuándo será necesario acudir a consulta y cuando no será ya un problema puntual. “La decisión de acudir a un profesional de la psicología y la sexología debe tomarse cuando hay algún aspecto de nuestra sexualidad en este caso que nos está generando malestar. No necesitamos sentir que estamos fatal o que llevamos cinco años con el problema para acudir. Es más, cuanto más próxima esté la búsqueda de ayuda a la aparición del problema más rápida será la solución de dicha dificultad. Una vez que se inicia un proceso terapéutico se realizará la evaluación clínica correspondiente, se propondrán los objetivos a alcanzar y se iniciará el tratamiento específico e individualizado para superar el problema”, explica Sonia García a este portal.

Sí que es cierto que hay hombres que tardan más en eyacular, “pero para ellos no es ningún problema”. “Cuando la pareja está buscando quedarse embarazada es un don, ya que lo que se busca es que él pueda eyacular. Algo que parece un problema, en un momento determinado de la vida sexual de la pareja se convierte en un don”, puntualiza Ruth González Ousset, sexóloga, psicoterapeuta y terapeuta de pareja. “El tiempo no tiene que determinar una mala o buena práctica sexual; hay mujeres que buscan que sus maridos tarden más en eyacular”, concluye la especialista.