Cómo decorar huevos de pascua con tus hijos esta Semana Santa

  • La costumbre de decorar los huevos de Pascua comenzó en el siglo IV cuando no se podían comer durante la Cuaresma

  • Los huevos se bañaban en una fina capa de cera líquida para su conservación y después se adornaban

  • Podemos seguir esta bonita y entretenida tradición y pintar de mil maneras los huevos de Pascua con nuestros hijos

Pasar una mañana o una tarde decorando huevos de Pascua esta Semana Santa es muy divertido para los niños. Además, en todas las casas hay un montón de cosas que pueden servir como rotuladores, cintas de colores, pintura de dedos, plastilina, témperas, botones, lana, retales de tela…

Esta tradición de decorar huevos de Pascua viene de lejos. El día de Pascua es una fiesta cristiana que este año se celebra el domingo 17 de abril para conmemorar la resurrección de Jesucristo y finalizar la Semana Santa. Tradicionalmente, en el centro de Europa, en Inglaterra y en Estados Unidos ese día tan señalado se esconden huevos y conejos de chocolate por la casa para que los niños los encuentren.

La costumbre comenzó en el siglo IV, cuando los huevos simbolizaban la vida y la fertilidad, una vida que arrancaba en la naturaleza al comenzar la primavera tras la Semana Santa. Durante la Cuaresma los cristianos católicos no podían comer huevos ni productos lácteos entre otros alimentos, así que bañaban los huevos con una fina capa de cera líquida para que no se les estropearan y a veces también los decoraban. Al terminar la Cuaresma regalaban los huevos que les habían sobrado a sus vecinos. La costumbre se ha ido trasladando y adaptando hasta ahora.

Cómo decorar huevos de Pascua con niños

Vamos a proponer unas cuantas ideas para decorar huevos de Pascua con los pequeños. Será una forma estupenda de pasar una tarde en familia y en casa. En primer lugar, hay dos opciones: cocer los huevos para trabajar con ellos en duro o vaciarlos. Si la decisión es vaciarlos por supuesto que se pueden aprovechar la clara y la yema para cocinar.

El proceso consiste en hacer un pequeño agujero en un extremo y otro un poco más grande en el otro y agitar el huevo suavemente encima de un recipiente para que salga el contenido. Después hay que colocar la cáscara bajo el agua del grifo, pero sin presión, de modo que se limpie por dentro sin romperse y por último dejar que se seque.

Teñir de colores

En este caso se necesita colorante alimentario para echarlo en agua junto a una cucharada de vinagre. Se introduce el huevo cuando hierva el agua y se saca con una cuchara. Se deja secar, se enjuaga y una vez seco ya se puede decorar.

Personajes

Si se quieren convertir los huevos en personajes solo hace falta un rotulador negro indeleble, unos retales de tela y pegamento textil o una pistola de silicona caliente. Se les pinta los ojos, las cejas, la nariz y la boca y se coloca un pequeño rectángulo de tela bajo la boca a modo de ropa.

Pirata

Para sujetar la falda se necesita el pegamento o la silicona. Para transformar el huevo en un pirata se le dibuja un parche y un ojo en vez de dos y se pega un triángulo de tela sobre los ojos como si fuera un pañuelo. La misma huevera sirve para exponer todos los personajes que se quieran hacer.

Minions

Se necesitan ojos móviles de pegar de los que se usan en las manualidades. Se tiñe la mitad del huevo con colorante azul y la otra mitad se pinta con témpera amarilla. Se colocan uno o dos ojos, se bordean con rotulador negro y se dibuja una línea que una esos ojitos a modo de gafas. Por último, se les pinta la boca con diferentes muecas: abierta, cerrada, torcida, de asombro…

Primaverales

Consiste en teñir los huevos de diferentes colores y después dibujar flores que los niños pueden copiar de uno de sus libros. Les resultan muy fáciles las margaritas, los tulipanes, las rosas o las amapolas.

Emoticonos

En este caso se tiñen los huevos con colorante amarillo y tras secarse se pintan con un rotulador negro y pinturas acrílicas de colores los emoticonos típicos que se añaden en las conversaciones de las redes sociales.

Animales

Tras teñir los huevos de colores, con plastilina se hacen las extremidades y las orejas de los animales. Para hacer una cebra no hace falta teñir, solo imitar sus rayas negras con un rotulador permanente y ponerle sus patas y sus orejas de plastilina negra.

Ratones

Con los huevos en blanco en uno de sus “polos” se pinta un punto gordito a modo de hocico y unos bigotes. Las orejas se hacen con dos triángulos de cartulina marrón o con fieltro. Se dobla uno de sus extremos a modo de pestaña para pegarlos con silicona caliente.

Huellas

Con pintura de dedos o con temperas los niños pueden marcar sus huellas en los huevos y aprovechar para dibujar animales o personajes añadiéndoles ojos y boca.