Humidificadores para bebé: la guía definitiva si se quiere tener uno

  • El humidificador servirá para hacer de la habitación del niño una estancia más agradable y cómoda para él.

  • Pero antes de hacerte con uno, tendrás que tener en cuenta los niveles de humedad de su habitación.

Cuando nos quedamos embarazadas, nos damos cuenta del increíble y variado mundo de la puericultura. Existen una infinidad de productos para los bebés y tendremos que ser nosotros, los padres, quienes decidamos cuáles son realmente imprescindibles y cuáles no. Los accesorios para la cuna y el carro son variadísimos, así como las opciones para dar leche de fórmula. También, para el bienestar y el descanso del bebé podemos encontrar una infinidad de fórmulas y productos para ayudarles. Por ello, siempre tendremos que consultar a un especialista, quien nos dirá si esos productos son necesarios y si va a aportar algún beneficio al bebé.

¿Para qué sirve?

Es el caso, por ejemplo, del humidificador para bebés. Muchas personas se preguntarán para qué sirve y si le hará bien al pequeño. Pues bien, lo cierto es que este tiene una gran cantidad de beneficios. Se trata de un aparato que permite regular y controlar la humedad de la habitación del bebé y, también, de toda la casa. La humedad puede variar de cero a cien por cien. Los valores de humedad relativa considerados adecuados para los bebés y los mayores oscilan entre el 40 y el 60 por ciento. Además, si el clima donde vivís es seco o tienes que encender la calefacción o el aire acondicionado, mantener estos niveles óptimos no es nada fácil.

Cabe destacar que el sistema respiratorio del bebé es muy sensible y sobre todo a ciertos factores ambientales como la humedad relativa y la temperatura. Por ello, mantener su habitación a unos niveles de humedad recomendados será lo mejor para el buen desarrollo del bebé y para olvidarnos de los respectivos problemas respiratorios.

Para medir la humedad ambiental, lo mejor será tener en casa un higrómetro. Si después de medirla, esta se encuentra fuera de los valores óptimos, sabrás si debes aumentar o reducir la humedad de la habitación del pequeño. Además, los humificadores más modernos cuentan con higrómetro y de un higrostato, para regular la humedad y evitar que esta aumente demasiado.

¡Cuidado con la falta y el exceso de humedad!

Aún así, tendrás que saber que tanto la falta de humedad como el exceso de la misma no hará ningún bien al bebé. Cuando falta humedad el bebé puede presentar irritación y picor en los ojos, piel seca, labios agrietados, mucosas secas, agravamiento de los síntomas del catarro, dificultades para respirar, dolor de cabeza y malestar general. Cuando se produce un exceso de humedad también se produce malestar y favorece el crecimiento de organismos como ácaros y hongos, aumentando el riesgo de enfermedades y alergias. Los bebés tendrás más posibilidades de presentar estos síntomas ya que su sistema inmunológico está menos desarrollado que el de los adultos.

Aspectos a tener en cuenta antes de comprar uno

A la hora de comprar un humificador tendrás que tener en cuenta varios aspectos. El primero de ellos será el tipo de vapor. El de frío producirá un vapor a temperatura ambiente, por lo que la temperatura de la casa no aumentará. Además, estos funcionan mediante ultrasonidos que hacen que se evapore el agua del recipiente.

También, hay que tener en cuenta que son los más seguros ya que el niño no se podrá quemar y, además, consumen menos electricidad. Uno de sus mayores inconvenientes es que se tendrá que limpiar con una mayor frecuencia, para evitar, así, la acumulación de bacterias. Por su parte, el humificador de vapor caliente será más útil para que respiren los bebés, ya que ayuda a abrir las vías respiratorias. Eso sí, consume más electricidad y hay que tener más cuidado para que el bebé no llegue a quemarse.

Respecto a la potencia del humidificador, todo dependerá del tamaño de la habitación. Si se trata de una sala grande, se necesitará uno con más potencia para que pueda llegar a todas las esquinas. Los fabricantes indican el área máxima recomendada para cada uno de los modelos; por eso, deberás fijarte bien en la distancia recomendada, para que el humidificador sea eficiente. En resumen, para saber si realmente lo necesitas o no, lo mejor será que lo consultes con el pediatra, que será él quien te dará las indicaciones adecuadas.

Los mejores del mercado

Como ya hemos comentado, en el mercado puedes encontrarte una infinidad de humidificadores. Uno de los más famosos es el de TaoTronics, con un precio muy bueno, gran potencia, muy silencioso, con apagado automático y limpieza fácil. El humificador de TensWall tiene un precio más bajo, pero hace algo de ruido. Aún así, es perfecto para dormir y admite aceites esenciales, un gran punto para la relajación del bebé. Además, es ideal para alergias y catarros.