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Halloween es una de las fiestas preferidas de los niños. La noche más terrorífica y divertida del año viene cargada de un montón de experiencias para los más pequeños que van más allá del clásico “truco o trato”.
Elegir (o hacer) el disfraz y preparar platos espeluznantes son algunas de ellas. Hacer manualidades que sirvan para jugar, decorar la casa o sencillamente pasar un buen rato, es una forma estupenda de celebrar esta fecha tan especial para ellos y de que pasar tiempo juntos. Aquí te proponemos manualidades de Halloween para todos los gustos y muy sencillas de hacer, con las que vais a pasarlo de miedo.
La noche de Halloween es la noche de las brujas, y ya sabemos que una bruja no es auténtica si no va acompañada de un gato y de su escoba. Esta de aquí es de lo más simpática (al igual que su gato), y solo necesitas un par de rollos de cartón del papel higiénico, cartulina y muchas ganas de pasarlo bien haciéndola.
Halloween puede ser una fiesta de lo más colorida, algo que gustará sobre todo a los más pequeños. Les puedes proponer pintar una telaraña como esta con diferentes colores, y colgar de ella estas inofensivas arañas hechas con un rollo de papel o cartulina.
Hay manualidades que son tan sencillas como divertidas y resultonas. Pintar globos blancos y naranjas con un rotulador negro, haciendo todo tipo de caras monstruosas, os servirá para pasar tiempo entretenidos y, además, os servirán para decorar la casa.
Esta manualidad es super original y sorprendente. Con pintura de dedos pueden plasmar sus manos en diferentes colores sobre el papel y utilizarlas como las caras de todo los monstruos que se os ocurran. Seguro que se parten de la risa.
Aprovechad un paseo otoñal para recoger hojas caídas de los árboles. Luego solo tenéis que pintarlas de blanco y dibujar los ojos y la boca con rotulador negro ¡y serán fantasmas! Podéis utilizarlas como decoración y, como puedes comprobar, cuantas más hojas diferentes haya, más tipos de fantasmas habrá.
Una de las formas más eficaces de crear un ambiente terrorífico en Halloween es con una iluminación adecuada. Y conseguirlo no es nada complicado con estas lámparas hechas con botes de cristal, papel higiénico y guirnaldas de luces. ¡Les encantará verlas encendidas!
Mira qué sombreros de bruja tan ideales para decorar la casa. Están hechos con platos de plástico, cartulina y goma eva. Podéis pintar los platos con spray de colores para conseguir un efecto ligeramente degradado. Además, su pintura se seca muy bien sobre el plástico.
Esta idea para decorar la mesa el de día de Halloween es muy (muy) sencilla, resultona y divertida. Con unos ojos de plástico y unos pimientos de colores cortados por la mitad ya tenéis a los invitados más divertidos y escalofriantes.
Nos encantan los personajes de Halloween que resultan entrañables, como estos murciélagos. Son sencillos de hacer si cuentas con los materiales necesarios, y seguro que tus hijos quieren seguir jugando con ellos el resto del año.
Las calabazas son unas de las protagonistas indiscutibles de la fiesta de Halloween, y estas se hacen, tal y como puedes ver, con manzanas. Son perfectas para hacer invitaciones, bolsas para chuches o para decorar. Parte una manzana por la mitad y cúbrela con pintura naranja para obtener un tampón con forma de calabaza. Un par de rotuladores ¡y listo!