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Nos habíamos acostumbrado a que los pañales fueran de celulosa y deshechables, y ya casi se nos había olvidado que nuestras abuelas, sin ir más lejos, usaban pañales de tela o de plástico, y que estos eran reutilizables. Por suerte muchas marcas de pañales se han adelantado a la conciencia general de que el término “deshechable” no es mejor que “reutilizable”, ni mucho menos, y los pañales de tela han vuelto en versiones tan cómodas y prácticas como ecológicas.
Nuestra conciencia medioambiental es cada vez mayor y ys sabemos que son los pequeños gestos los que ayudan a cuidar del planeta, como seguir unas pautas de reciclaje o evitar el consumo de plástico en la medida de lo posible. Utilizar pañales reutilizables es uno de esos gestos, y no es tan pequeño como pudiera parecer, ya que el consumo de celulosa deshechable que acaba invadiendo nuestros mares y océanos es uno de los grandes problemas medioambientales que está en nuestra mano frenar.
Los hay pre-doblados, que se pueden utilizar hasta que dejan el pañal, y se venden por docenas. Los modelos más recientes han sustituido el corte rectangular por uno con curvas, mucho más cómodo para el bebé.
Los ajustables están completamente confeccionados con tela, se utilizan con un cobertor de pañales y se ajustan con velcro o botones.
También hay pañales con bosilllo. Son de microfibra e incluyen el bolsillo para que puedas guardar en él una capa absorbente.
Para cuando se acerca el momento de decir adiós al pañal, existen pañales de entrenamiento. Tienen un panel absorbente y grueso que facilita al niños reconocer cuándo está mojado.
Y para los días de playa y de pisicina hay pañales confeccionados con el mismo material con el que se fabrican los bañadores. Sirven para contener las heces, pero no el pipí.
Tal y como decimos, usar pañales de tela es una manera muy eficaz de cuidar del medio ambiente, reduciendo la huella ecológica de tu bebé y tu familia en el planeta. Se estima que en los dos primeros años de vida un bebé utiliza alrededor de 6000 pañales, una cifra que nos anima a pensar en la cantidad de material deshechable casi imposible de reciclar.
En cuanto al bienestar del bebé, los pañales de tela ganan puntos frente a los de celulosa, porque están fabricados con materiales que respetan el pH natural de su piel, como el algodón, el bambúl, la soja o la microfibra. Son más transpirables, evitan la irritación de la piel, no causan alergias y se reduce la posibilidad de sufrir la dermatitis del pañal, que es tan incómoda para el bebé, sobre todo si su piel es sensible o atópica.
Puedes usarlos en todas las etapas del crecimiento sin tener que estar pendiente del cambio de talla como ocurre con los pañales deshechables ya que son ajustables si se van adaptando al ritmo al que crezca tu bebé.
Aunque puedan parecer más caros al principio, en realidad los pañales reutilizables son mucho más económicos que los de celulosa y suponen un ahorro a largo plazo. De hecho, es posible que puedas conservarlos en buen estado tras pasar la etapa del pañal y que los hereden los hermanos que vengan.
Y, por qué no incluirlo en las ventajas, los diseños que puedes encontrar en los pañales de tela son muy bonitos y coloridos, y seguro que te gustan tanto a ti como a tu hijo.
Las desventajas tienen más que ver con nuestra predisposición a buscar lo cómodo y efectivo, que muchas veces se traduce en el concepto de usar y tirar, y los pañales de tela no lo son a priori, porque tienes que lavarlos con frecuencia. Pero esto, como tantas otras cosas, es solo una cuestión de hábito.
Es cierto que pueden resultar más incómodos para viajar, porque al cambiarlos no puedes lavarlos con la inmediatez que lo harías en casa, y seguramente tengas que guardarlos en una bolsa hasta que pudieras limpiarlos. Hay madres y padres que, aunque utilizan por sistema los de tela, los sustituyen por pañales deshechables para determinados viajes.
A la hora de vestir al bebé, es cierto que los pañales de tela abultan un poco más que los de celulosa, y que haya determinada ropa que le quede muy ajustada.
Estos son algunos de los pañales de tela mejor valorados, por si estás pensando en lanzarte a probarlos:
Se les considera unos pañales de excelente calidad. Los de talla única se adaptan al crecimiento y desarrollo del bebé. Cuentan con una buena barrera protectora que los hace a prueba de escapes. Se limpian con facilidad y se secan con rapidez.
Hechos a prueba de derrames y fabricados en bambú, los que les confiere una calidad que perdura en el tiempo y que la permeabilidad vaya en aumento..
Su relleno de bambú de cuatro capas los hace súper absorbentes, por lo que resultan excelentes para la noche.
Tienen una excelente relación calidad/precio que los ha convertido en uno de los pañales mejor valorados por los padres. Se adapatan a todas las etapas de crecimiento del niño y destaca su seguridad para evitar posibles escapes.
Es uno de los mejores pañales de talla única y destacan por su calidad y por la facilidad para ajustar las absorbencias, ya que quedan semi-adheridas.