Paso a paso: grupos de edad para elegir la silla de coche perfecta

  • La silla para los coches de los niños es un mecanismo importante y obligatorio para la seguridad de los más pequeños en la carretera

  • Saber escoger la silla adecuada es importante, siempre guiándose por ciertos factores, como el peso o al altura, para encontrar la correcta

Hay algo indudable, y es que los niños crecen a pasos agigantados. Sin darte cuenta, en el ropero quedan prendas de ropa con la etiqueta que nunca se pusieron y ya no les valen. Pero más allá de dramas textiles, hay un aspecto que siempre hay que tener en cuenta: la silla del coche. Tal y como establece la Dirección General de Tráfico (DGT), los menores de 12 años que no alcancen los 135 centímetros deben usar obligatoriamente un dispositivo de retención adaptado a su talla y peso, lo que quiere decir que la edad puede ser orientativa, pero la última palabra la tiene las condiciones físicas del niño.

La DGT alerta de la importancia, no solo de llevar el sistema de protección, sino también la silla adecuada para cada niño, pues podría reducir hasta en un 75% la muertes infantiles en accidentes de tráfico. Cuando se va a adquirir una silla siempre debe estar homologada para verificar que es segura, además de probarla, ver si el niño va cómodo, se adapta bien al sillón del coche, etc. Aún así, ten en cuenta que tendrás que cambiar de silla más de una vez, pues dependiendo del peso existen hasta cinco tipos distintos. ¿Quieres saber cuál podría ser la de tu hijo?

Grupo 0

Estas sillas son las adecuadas para niños de hasta 10 kilos, más o menos hasta que cumplen su primer año. Estas sillas, tal y como explica la DGT, se deben colocar en el sentido contrario a la marcha y, aunque lo más recomendable siempre es colocarlo en los asientos traseros, también pueden ir en los delanteros, a no ser que sea un capazo. En el caso de estas sillas, siempre deben ir en los asientos posteriores.

Grupo 0+

Para niños de hasta 13 kilos o 18 meses, aproximadamente, la silla adecuada es la del grupo 0+, muy similares a las anteriores. También deben ir colocadas en el sentido opuesto a la marcha, preferentemente en los asientos traseros. Estas sillas están protegidas mediante un sistema de arneses que se anclan en el vehículo para una mayor protección del pequeño. La DGT recuerda que si la silla lleva un asa, debe colocarse según indican las instrucciones para una correcta protección.

Grupo 1

Estas sillas están destinadas a los niños que pesan entre 9 y 18 kilos, más o menos aquellos que tienen entre uno y cuatro años, por lo que a esta se le podrá dar mucho más uso que a las anteriores. Las de este grupo ya no van en el sentido contrario de la marcha, sino que miran hacia delante y siempre se debe instalar antes de sentar la niño. Además de sus instrucciones de anclaje, verifica que también esta bien sujeto mediante el cinturón de seguridad del propio vehículo. A pesar de que puede ir en el asiento del copiloto, este es el más peligroso, por lo que lo mejor es mantenerlo en uno de los posteriores.

Grupo 2

Estos asientos ya son más elevados, para niños de entre 15 y 25 kilos, cuando ya la silla del grupo 1 se les ha quedado pequeña. Esta silla ya es algo más alta para que el niño pueda utilizar el cinturón de seguridad del vehículo sin ningún tipo de problema, por lo que es el propio sistema de seguridad del coche el que sujeta tanto al niño como al elevador. Aunque los hay sin respaldo, la DGT aconseja los que sí lo llevan porque son más cómodos y ofrecen una protección mayor.

Grupo 3

Los elevadores del grupo 3 son bastante similares a los del grupo 2, lo que en esta ocasión, al ser para niños de entre 22 y 36 kilos, hasta 12 años aproximadamente, que ya son más grandes, suele ser solo un elevador sin respaldo que también irá sujeto con el cinturón de seguridad del coche.

¿Pueden ir sin silla aunque sean menores de 12 años?

Hay una excepción para que los menores de 12 años puedan ir sin silla, sentados en los asientos del coche sujetados por su cinturón. Esto se puede hacer cuando el niño tiene una altura igual o superior a 135 centímetros. Aunque no es obligatorio como en los demás casos, se aconseja que hasta que se llegue a los 150 centímetros se siga utilizando una silla homologada.

Y muy importante saber poner el cinturón correctamente. Este debe pasar por la clavícula y sobre el hombro, siempre pegada al pecho. Mientras, la banda horizontal tiene que ir sobre la cadera, lo más baja posible. En caso de que la banda diagonal toque el cuello, revísalo bien, porque puede ser que el niño necesite aún un asiento elevador.