Los vestidos de invitada naranja son tendencia: seis ideas para brillar en una boda

El naranja arrasa entre los tonos de tendencia del otoño invierno 2022/2023, un color poco habitual en esta época del año pero que la pasarela ha decidido convertir en protagonista junto a otros como el fucsia o el rojo y en uno de los favoritos de las invitadas de boda mejor vestidas.

Las opciones van del mandarina más vitaminado al naranja teja y todas son igual de apetecibles cuando se trata de sorprender con un look de invitada diferente, optimista y muy actual. Lo mejor del naranja es que favorece a las pieles bronceadas y a las que no lo están, todo depende del tono elegido y del color de los complementos con que se combine para rebajar o aumentar su intensidad.

Estas propuestas te ayudarán a encontrar el vestido naranja de invitada perfecto para tus próximos eventos.

La colección creada por Narciso Rodríguez en colaboración con Zara rescata algunos de sus modelos icónicos desde 1997. Este modelo, que pertenece a la colección de 2018, es un vestido midi de cuello amplio y detalles fruncidos en el costado confeccionado en tejido de lana, es la pieza perfecta para una boda tanto de día como de tarde o noche.

Este modelo largo de tirantes y escote de pico con acabado satinado es un modelo de Massimo Dutti que la firma propone combinar con un pantalón extralargo, también de acabado satinado, en un tono naranja más apagado para potenciar el contraste entre las dos prendas.

Para un look bohemio, aciertas con este modelo tipo caftán de H & M confeccionado en mezcla de lyocell y lino, con bordados vegetales. Una pieza perfecta para quienes buscan un vestido al que sacar mucho partido más allá del día de la boda.

Este vestido de largo midi pertenece a la colección de verano de The IQ Collection, una propuesta diferente para una boda de día en el campo que llamará la atención, además de por su colorido, por el patrón de las mangas, el corte cut-out en la cintura y los detalles mexicanos de la falda.

La apuesta de Cortana es un vestido largo confeccionado en crepe de seda, con varios godets que le aportan mucho movimiento y un chal multiposición que convierte el vestido en una pieza transformable.

Apostar por el color no significa renunciar a la sencillez y lo confirma este modelo de The Reformation, un vestido midi de escote halter, espalda descubierta y corte relajado ligeramente ajustado.