El bolso de playa, también en la ciudad: así puedes combinarlo con éxito

Los canastos, capazos y bolsos de rafia, yute, paja o bambú son el complemento perfecto de los días de playa, piezas cómodas en las que caben sin problema la toalla, las cremas de protección y hasta una muda por si el día playero se alarga, aunque cada vez es más común llevar el bolso de playa en la ciudad.

Son una opción más ligera y ecológica que los bolsos de piel, los de tela o los de plástico y sin duda combinan mejor que ningún otro con el armario de verano llegando a convertirse en un compañero inseparable a cualquier hora del día.

Otra de las ventajas de los bolsos de playa es que suelen variar poco de unas temporadas a otras, y esa atemporalidad los convierte en una buena inversión que puede durar muchos años.

Si no estás habituada a llevarlos más allá de la playa, estas ideas te servirán de inspiración para sacarlos de contexto y usarlos también en clave urbana.

La primera propuesta vine de la mano de Lucy Williams, que combina un capazo de tamaño XL, uno de los bolsos de playa más cómodo, con un look práctico y sencillo compuesto por pantalón estampado de rayas, camiseta y las clásicas sandalias thong.

Un look propiamente urbano como el de Anne Laure en el que combina un pantalón de lino con camiseta y chaqueta de cuero, se convierte en verano en el lienzo perfecto para ir a la compra con un capazo de playa.

Blanca Miró apuesta por un shopper de yute con bordados de flores, el bolso de playa ideal para ir a la compra, que combina con falda pareo y camisa blanca masculina. Una bandana para sujetar la melena es la pieza con la que añade un toque aún más especial a su estilismo.

Ligero, pero de gran capacidad, los bolsos de macramé son tan adecuados para ir a la playa, como para hacer la compra en el mercado o para un look veraniego sin complicaciones como el que propone Jen Azoulay, que lo combina con un estilismo en tonos neutros compuesto por un pantalón satinado, microtop y sandalias planas en color crema y camisa blanca anudada a la cintura.

Si hay un modelo que no pasa de moda, ese es el clásico canasto de paja de asas cortas y forma trapezoidal, una pieza de toda la vida que María de la Orden integra fácilmente en un estilismo urbano de aires románticos compuesto por una falda estampada de rayas con talle bajo y una blusa blanca de mangas abullonadas.

En clave minimalista

El 'tote' es el tipo de bolso que se ha convertido en la alternativa ecológica de las bolsas de plástico del súper y aunque lo habitual es verlos en tejido de algodón, algunos modelos de rafia han alcanzado la categoría de objeto de deseo, un modelo que exige pocos malabarismos estilísticos y que Hedvig Sagfjord combina en clave minimalista.

Un mono de lino, que esta temporada son una de las tendencias a tener en cuenta, es uno de los mejores compañeros para los días de calor en la ciudad. Anouke Yve apuesta por combinarlo con zapatos bicolor y un capazo de grandes dimensiones que añade un toque desenfadado a su estilismo.

Si buscas un estilismo cómodo, fácil y efectista, copia el de Alyssa Coscarelli, que apuesta por un estilismo en el que suma un clásico capazo de playa a un look retro en el que combina un minivestido recto con cinturón ancho a la cadera y sandalias thong de plataforma.