El abrigo masculino. Este es el año de las formas rectas, los patrones ‘oversize’ y los tejidos ‘vintage’. Si tienes un abrigo recto de espiguilla como el de Gwen Stefani, uno clásico de paño en color camel como el de Fearne Coton o amplio y de mezclilla, la nueva creación de Isabel Marant para H&M que lleva Audrey Taoutou, es el momento de volver a sacarlo a la calle.
El abrigo femenino. En el extremo contrario está el gesto de ceñir la cintura para acentuar las formas y que contribuye a feminizar un abrigo sobrio como el de cuadros de Giovanna Battaglia. Para añadir romanticismo sigue el ejemplo de Miroslava Duma y suma al ‘look’ un estampado de flores o un color cálido como el abrigo-vestido de color salmón de Hanneli Mustaparta.
El abrigo de cuento. La capa nos recuerda a príncipes y princesas de cuento, aunque en su defecto nos tengamos que quedar con la de la hermanísima Pippa Middleton. La versatilidad de esta prenda permite combinarla, para un estilo ‘casual’ con jeans y botas, como hace Rooney Mara, o más ‘lady’ con vestidos y zapatos de tacón, como la lleva la actriz Clemence Poesy.
El abrigo largo. Para llevar este tamaño de abrigo la altura no es importante, para lucirlo correctamente sí. Si no eres demasiado alta como Kim Kardashian que no llega al 1,60 m de estatura, tendrás un aspecto fantasmal con una prenda tan larga, pero si pasas del 1,70 m, como Katherine Heigl y Pixie Geldof, un abrigo largo te dará un aire elegante y sofisticado.
El abrigo corto. Por fortuna el abrigo mini también está de moda. El chaquetón marinero de toda la vida que lleva Jessica Alba es una perfecta prenda de día que consigue aportar formalidad hasta a un pantalón desgarrado. La opción para la noche pasa por enseñar pierna y combinarlo con tacón, siguiendo el ejemplo de Laura Whitmore y Alexa Chung.
El abrigo de lana. Tejer es la última tendencia, si ya has pasado el nivel de la bufanda prueba con algo más complicado. Los abrigos de punto como los que llevan Elle Macpherson y Mary-Kate Oslen tienen un aspecto confortable inigualable, aunque esta prenda puede llegar a ser tan divertida como el de la colección de Isabel Marant para H&M que luce la modelo Alek Wek.
El abrigo de plumas. Un básico y ya clásico para los días de frío (porque calienta como ninguno), para viajar (porque no pesa) y para bajar a comprar el pan en las mañanas de domingo (porque te puedes vestir solo a medias). Elizabeth Hurley y Salma Hayek los usan en el set de rodaje, para no helarse entre toma y toma, para Paris Hilton es la prenda perfecta para viajar por su ligereza y comodidad.
El abrigo de piel. Es una prenda otoñal pues tanto el cuero como la piel aíslan de la humedad pero, a menos que tengan un forro adecuado, no quitan el frío. Los hemos visto sólo de piel, el Burberry de Blake Lively o combinados, bien con otras pieles, el sofisticado de Anna Wintour, bien mezclando cuero y paño, el deportivo de Cara Delevingne.
El abrigo de color. Frente a los venideros días grises la alternativa es poner color a nuestro vestuario. Puedes ser la más cosmopolita con un abrigo de plumas azul eléctrico como el de Sarah Jessica Parker, una caperucita urbana con uno rojo como el Michael Kors de Jessica Chastain e incluso atreverte con el amarillo por el que opta la reina Margarita de Noruega.
El abrigo rosa. Si hablamos de color no podemos pasar por alto el rosa, el color de este año. Es capaz de alegrar cualquier ‘look’, por eso es fácil verlo combinado con vestidos negros como el que llevan Eva Mendes y Reese Witherspoon, aunque las más atrevidas, Anna Sophia Robb en su papel de Carrie Bradshaw en “The Carrie Diaries”, sean capaces de unir en un solo estilismo leopardo, lunares, flores y una gama variada de colores.
El abrigo animal. Es un estampado que vuelve cada año. Tigres, cebras, leopardos: la fauna urbana lo admite todo. Para combinarlo bastará un sencillo vestido, el estilo del de Eugenia Niarchos. También puedes confundir con diversos ‘prints animal’, la opción de Elena Perminova o ponerle un punto romántico con un vestido blanco como el de Sienna Miller adornado con puntillas blancas.
El abrigo sobre los hombros. No sabemos quién fue la primera, pero lo cierto es que se ha puesto de moda dejar caer el abrigo sobre los hombros. Se trata del gesto ‘vintage’ del año que han adoptado Solange Knowles, Alexa Chung, Victoria Beckham y una de las mujeres más influyentes de la moda, la presidenta y directora creativa de la marca americana J. Crew, Jenna Lyons.