Susana Molina se prepara para una nueva etapa en su vida, pues pronto pasará a ser una mujer casada, algo que parecía casi imposible al finalizar su paso por La isla de las tentaciones, donde tomaba la decisión de marcharse sola del programa, dando por finalizada la relación con Gonzalo Montoya tras siete años juntos. 

No fue una decisión sencilla para ella, pero el tiempo demostró que era la correcta, pues pasado el duelo, las cosas en su vida se fueron colocando, fueron abriéndose nuevas puertas profesionales y encontrando la estabilidad y el equilibrio que necesitaba para darle una nueva oportunidad al amor, algo que sucedió cuando conoció a Guille Valle, quien el 13 de junio se convertirá en su marido. 

Guille Valle, pareja de Susana Molina: de veterinario a empresario 

A pesar de que los seguidores de la influencer parecían tener claro que la pareja se había conocido gracias a la profesión de Guille, Susana explicó a través de sus redes sociales que no había sido así. No se conocieron porque Guille fuera el veterinario de Bruno, el perro de la creadora de contenido, sus vidas se cruzaron en una fiesta, gracias a un amigo común. Esto pasaba el 13 de junio de 2020.  

Su relación fue avanzando poco a poco, estuvieron un tiempo “que sí, que no”, sin embargo, esto cambió y su relación se afianzó cuando le encontraron un bulto en el pecho a Susana, junto en un momento en el que habían decidido que lo mejor era dejarlo. Fueron semanas de incertidumbre, donde ella lo pasó muy mal, pero pudo contar con Guille. “Me hicieron pruebas y ya descartaron que era malo, pero esto nos unió un montón. A partir de ahí, lo tuvimos más claro. Fue una señal. Yo creo mucho en el destino”. 

A pesar de Guille es veterinario de carrera y ejerció en una clínica durante bastante tiempo, actualmente ya no es así. Junto con Susana se estrenaba en el mundo empresarial con ViveApp, que buscaba poner en contacto a influencers y empresas. Un primer paso que pareció gustarle porque el mundo de la comunicación parece haberse convertido en su profesión gracias a la agencia de comunicación Momo Studio, de la que es CEO y cofundador. 

Su vida ha cambiado bastante desde que comenzó su relación con Susana, pero no parece haber cambiado su manera de vivirla, porque sigue siendo un hombre discreto, que acompaña a su pareja, pero siempre optando por permanecer en un segundo plano. Amante de la aventura y los animales, parece más que feliz de compartir su vida con Susana y sus mascotas, dos perritos llamados Bruno y Bertín. 

Juntos, Guille y Susana están planeando su vida en común, entre sus planes están los de mudarse a su nueva casa, aunque para eso primero tienen que finalizar el proceso de construcción. La pareja vivirá en una casa industrializada (que se construye en módulos y después se transporta y ensambla sobre el terreno, en lugar de seguir el proceso tradicional) en Madrid.