Juan José Ballesta anunciaba a principios de este mismo año que él y Veronica Rebollo habían finalizado su matrimonio después de 15 años de relación. El intérprete reconocía que había sido su mujer la que había tomado la decisión de tomarse un tiempo debido a que “estaban un poco estresados”. Un duro revés para el actor, que seguía definiéndola como “la mujer de todas mis vidas”. El madrileño solicitaba respeto para ambas partes y esquivaba hacer más comentarios públicos sobre este asunto. Sin embargo, tres meses después de este comunicado, él mismo nos ha hecho saber que tiene nueva novia a través de una entrevista para la plataforma playz.
Juanjo y otras personalidades que habían conocido la popularidad en su infancia se reunían en una mesa de debate para hablar de cómo gestionaron esta situación tan extraordinaria. Ballesta, que ganó el prestigioso premio Goya con tan solo 13 años, recordaba que llegó un momento que tuvo que retirarse de la interpretación por la presión que sufría; ya que “no podía salir de la calle” al ser tan conocido y, como consecuencia de esto, no podía disfrutar del dinero que había ganado. “No solamente te conoce todo el mundo, todo el mundo opina y se mete a tu vida. Algunas personas se creen que por haberte crecido en la tele tienen derecho a todo”, afirmaba en este programa.
“Yo siempre he sido un tío muy normal. Ahora mismo vivo en el campo con mi hijo, una oveja, dos cabras, con gallinas, con erizos…”, señalaba Ballesta en un momento de esta entrevista para recalcar lo feliz que es con lo que tiene ahora. En esta línea, Juanjo bromeaba con el presentador del espacio sobre la solución que tiene para evitar que se te suba la fama a la cabeza. “Te presento a mi oveja que te pega un palizón y se te quita la tontería rápido, más ahora que está en celo. Hace poco me dio un cabezazo que me he tirado una semana en el hospital, me fracturó una costilla”, desvelaba la posible explicación a las preocupantes imágenes que colgó en el hospital. “Me he echado novia y ahora no quiere ni verla, le tiene una envidia.... Estoy en el campo, le doy un abrazo y me dice: ‘cariño, me está mirando, suéltame, suéltame’. Viene a por ella del tirón”, desvelaba con naturalidad esta nueva relación sin entrar a dar más detalles.
Estar rodeado de naturaleza sería el motivo principal por el que Verónica Rebollo está feliz de que el niño, al que llaman cariñosamente Juanjito, viva con su padre. “Mi casa está en medio del campo, en el pueblo; tenemos una oveja que se llama Copo y es un ambiente muy sano para él”, contaba en una entrevista para ‘El País’. Más allá de que pase la mayor parte de su tiempo con él, el niño ve a su madre los fines de semana y cuando ella desea. “Lo ve siempre que quiere y al revés. Ha sido la mujer de mi vida y es la madre de mi hijo, por eso no entiendo otra forma de hacerlo”, dejaba claro que buscaba lo mejor para el pequeño.