Paulina Ducruet, heredera de la belleza de su prima, Carlota Casiraghi

Laura Santamaría Camacho 04/02/2013 15:04

Primogénita de Estefanía de Mónaco, nieta de la mismísima Grace Kelly y prima de Carlota Casiraghi; esta podría ser perfectamente la carta de presentación de Paulina Ducruet, pero lo cierto es que por méritos propios se ha ido ganando con el paso de los años un hueco en la prensa europea. No sólo la belleza de esta joven de dieciocho años está empezando a hacer sombra a la modelo Carlota Casiraghi, sino también sus éxitos como nadadora profesional.

Paulina Ducruet nació fruto de la relación entre Estefanía de Mónaco y Daniel Ducruet, su ex guardaespaldas. Una bonita historia de amor en la que nació además Louis, el segundo hijo de la pareja. Pero todo terminó debido a una escandalosa infidelidad de él con una bailarina belga. Desde entonces Paulina ha disfrutado de sus padres por separado, siendo contadas las ocasiones en las que se han podido ver a la ex pareja junta, pero no revuelta, y coincidiendo siempre con los cumpleaños, exhibiciones oficiales o fiestas de fin de curso de sus hijos.

Paulina siempre ha sido una niña muy especial, con aficiones muy peculiares. La relación sentimental que mantuvo su madre con Franco Knie, domador y director del famoso circo suizo que lleva su nombre, le dio la oportunidad de lanzarse al mundo circense llegando a hacer sus primeros pinitos como artista de doma de elefantes. Una etapa que recuerda con mucho cariño la hija mayor de Estefanía, recordando con añoranza los días que pasó viviendo en una caravana, compartiendo su día a día entre animales y serrín.

Aunque aún conserva un especial y compartido cariño con su madre por el circo, demostrándolo año tras año con su asistencia a cada edición del Festival Internacional de Circo de Mónaco y de su heredero, el Festival Nueva Generación, esta afición quedó atrás para Paulina.

También probó con la gimnasia destacando en ejercicios de barra y suelo. Pero la nieta de Grace Kelly encontró su verdadero talento dentro del agua. La natación profesional lleva siendo desde hace años un deporte en el que despunta Paulina, llegando a ser conocida por la prensa francesa como la ‘sirena de Mónaco’. Esta perseverancia deportiva ha seguido los pasos de su tía política, la antigua campeona sudafricana Charlene Wittstock, esposa de Alberto de Mónaco.

Un talento del que se siente muy orgullosa su madre Estefanía, ya que es una afición que comparte con su hija y aunque ella nunca practicó este deporte llegó a diseñar trajes de baño.

No sólo une a madre e hija la pasión por el circo, la natación y su belleza, también su parecido carácter. Que según unas declaraciones para ‘Hola.com’ Estefanía confiesa que Paulina “es atrevida y tiene curiosidad por todo, a veces digo que es mi miniyo”. ¿Arrebatará el puesto de ‘it girl’ a su prima Carlota Casiraghi?