Los centrales del Madrid y el Barça viven su particular historia de amor… en Twitter

Juanjo Palomo 05/10/2012 10:48

Sergio Ramos, que lleva una semana en el disparadero por sus dimes y diretes con Mourinho, ha querido sumarse a la cascada de mensajes de apoyo a Puyol, que el martes cayó lesionado en Lisboa frente al Benfica. Unas palabras muy tiernas de compañero a compañero que contribuyen a relajar el ambiente, siempre calentito, del Barça – Madrid. Tanto se quieren los dos jugadores que incluso ya se llaman con apodos juguetones. ¿Le susurrará Ramos a Puyol eso de ‘tiburón’ también en los saques de córner?

Aunque también podría ser que el sevillano no se ha cansado aún de meterle el dedo en el ojo –metafóricamente, claro- a Mourinho. Por todos es sabido que al míster no le gusta que sus discípulos tonteen con otras, sobre todo cuando son del Barça. Ya le costó una bronca a Casillas hace un par de años una llamada de teléfono a su compañero Xavi Hernández para suavizar los ánimos entre los eternos rivales.

El caso es que ésta no es la única muestra de amor entre los centrales de ambos equipos. No hace ni mes y medio que Piqué sacó su lado más humano con uno de sus más acérrimos rivales. En un partido contra el Valencia el pasado mes de agosto, Pepe sufría un durísimo golpe en la cabeza, teniendo que ser hospitalizado tras perder la memoria en el vestuario. Pues bien, apenas un día después el culé le mandaba su apoyo al malogrado central del Real Madrid. Quizá le pilló a Piqué en un momento especialmente tierno, ya que por entonces debía de saber que pronto iba a ser padre.

Esperamos que en el Clásico impere este ambiente de amor y ternura que se traen los cuatro defensas titulares del Madrid y Barça. Y si no, nos consuela pensar que el lunes estaremos contando la historia de una ruptura.