- Paso 1
Antes de nada, limpia e hidrata el rostro con tu crema de día habitual y espera un par de minutos antes de usar la base de maquillaje. Calienta esta en las palmas de las manos para facilitar su aplicación. Puedes utilizar una esponjita o bien aplicarla con tus dedos para repartirla uniformemente.
- Paso 2
Comienza por la parte central del rostro: mentón, mejillas y frente, y ve arrastrando el producto delicadamente del interior al exterior y de arriba abajo. No apliques producto en la zona de los párpados, pues lo único que conseguirás es engrasarlos.
- Paso 3
Toca difuminar. Presta especial atención a zonas como la raíz del cabello (en la frente y las sienes), las cejas y las aletas de la nariz. Una vez difuminado el producto, aplica polvos matificantes para evitar los brillos y la grasa en la zona T (nariz, frente, barbilla).