Así fue la boda de Joaquín Torres y Raúl Prieto en Sevilla hace dos años: celebración de lujo y con invitados famosos

La boda de Joaquín Torres y Raúl Prieto en Sevilla fue una celebración de lujo y emoción en la Casa de Pilatos, rodeados de invitados famosos, con un banquete exclusivo, anécdotas y una luna de miel improvisada en Cádiz
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El 19 de mayo de 2023, Sevilla se vistió de gala para acoger uno de los enlaces más mediáticos y esperados del panorama social: la boda del arquitecto Joaquín Torres y el director de televisión Raúl Prieto. Tras más de seis años de relación, la pareja sellaba su amor en un entorno incomparable, rodeados de amigos, familiares y un buen número de rostros conocidos. La celebración se convirtió en todo un acontecimiento mediático lleno de emoción, lujos y anécdotas que recordamos dos años después de su enlace con motivo de la inesperada separación de la pareja.

Una boda en la Casa de Pilatos con gran expectación
La Casa de Pilatos, en pleno centro de Sevilla, fue el escenario elegido por la pareja para darse el 'sí, quiero'. Minutos antes de la ceremonia, la expectación era máxima, con decenas de personas congregados a las puertas para ver llegar a los invitados. El enlace no solo reunió a los novios, sino también a una larga lista de initados famosos que no faltaron al enlace como Emma García o Terelu Campos, entre otros muchos nombres de la prensa del corazon.
La emoción se respiraba desde el inicio. Los novios habían preparado hasta el último detalle, desde el 'dress code', con esmoquin para ellos y traje largo para ellas, hasta una atmósfera de complicidad familiar, emoción y mucho amor. De hecho, uno de los momentos más emotivos de la ceremonia llegó con el hijo mayor de Joaquín Torres, que apareció vestido igual que su padre y dedicó unas emotivas palabras a la pareja. Su intervención emocionó a todos los presentes y simbolizó la unión de Torres con sus hijos en este nuevo capítulo de su vida.
"El hijo mayor de Joaquín creo que lo ha bordado, ha demostrado una educación, una generación que viene y que entiende lo que significa el casarse dos personas del mismo sexo y creo que nos ha emocionado a todos con su cariño y su sinceridad", comentó públicamente Pilar Vidal sobre aquel emotivo momento.

Un banquete de lujo y una fiesta inolvidable
Tras la ceremonia, los invitados disfrutaron de un banquete exquisito cuyo menú incluyó una ensalada de aguacate y langostinos, roast beef con patatas y champiñones y, como colofón, un postre de tocino de cielo acompañado de coulant de chocolate. Todo ello servido en un salón iluminado con velas que recreaba un ambiente íntimo, familiar y elegante. El enlace también estuvo lleno de detalles únicos, como galletitas con la forma de los novios o una sorpresa musical especialmente pensada para Raúl. Joaquín dedicó a su pareja la canción 'Si me das a elegir', de Los Chunguitos, que era un tema muy especial para la pareja, interpretada por un coro y una cantante en directo, lo que provocó lágrimas y aplausos entre los invitados y familiares.
La emoción también tocó a Raúl Prieto, conocido por su imagen firme y seria en televisión, pero que en este día mostró su faceta más vulnerable. Según relataron invitados como Terelu Campos, nunca se le había visto tan emocionado. "Nunca había visto a Raúl tan emocionado, como desbordado y a mí eso sí que me ha llamado la atención", dijo la madre de Alejandra Rubio, quien también acudió a la boda.
La fiesta continuó hasta la madrugada y también Joaquín y Raúl compartieron su primer baile como recién casados, un momento que los invitados no olvidaron.
Anécdotas inolvidables y una luna de miel improvisada en Cádiz
No todo salió a la perfección, ya que la velada nupcial ambién tuvo su "cara B". El enlace sufrió un retraso por motivos logísticos, lo que provocó el enfado de Kiko Matamoros, que llegó tarde a la ceremonia debido a problemas con el AVE. Sin embargo, la fiesta tomó el mando rápidamente y los novios lograron que todos sus invitados disfrutaran de una velada inolvidable.
En cuanto a la luna de miel, aunque inicialmente se habló de un viaje a destinos internacionales como Japón o la Provenza francesa, finalmente la pareja optó por disfrutar de unos días improvisados en Cádiz debido a sus agendas laborales. Para ellos, la ciudad gaditana es un enclave que les ofrecía descanso y estar cerca de la familia, especialmente teniendo en cuenta el delicado estado de salud de la madre de Joaquín Torres en aquel momento.

Dos años después, la boda de Joaquín Torres y Raúl Prieto sigue recordándose como un evento marcado por la emoción y la compañía de muchos de los amigos más cercanos de la pareja. Sin embargo, no ha sido suficiente para evitar la reciente separación sentimental entre ambos. Aún así, fue una celebración que reflejó la autenticidad de su amor de entonces y que Sevilla vivió un acontecimiento social por todo lo alto.
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