Raquel Sánchez Silva hace una excepción con sus hijos mellizos, Bruno y Mateo, al cumplir diez años: "Pasa el tiempo"

Hace una década, Raquel Sánchez Silva vivió uno de los momentos más importantes de su vida. Fue entonces cuando la presentadora abrió un capítulo clave en su vida, al convertirse en madre por primera vez. En el año 2015 nacían Bruno y Mateo, sus hijos mellizos, fruto de la relación sentimental que inició con el productor audiovisual argentino Matías Dumont hace más de una década. Raquel siempre ha preferido mantenerlos totalmente alejados de la ecuación mediática, aunque con el tiempo ha hecho excepciones, de forma puntual. Una de ellas se ha producido con motivo del décimo cumpleaños de los niños, por el que ha tenido un gesto cariñoso.

La extremeña suele dar cuenta en sus redes sociales de su faceta profesional pero, en ocasiones y con el paso de los años, ha abierto también una ligera ventana a su esfera personal. Así, es habitual que deje mensajes a su pareja, o que comparta fotos junto a él en ocasiones especiales. También, que detalle los viajes familiares que realiza con Matías y con los mellizos, aunque siempre dejándolos al margen de las imágenes y vídeos que comparte. En las últimas horas, no obstante, ha realizado un movimiento inédito, al que sus seguidores no están habituados.

Raquel Sánchez Silva muestra a sus hijos de diez años en una ilustración

Ha sido este domingo, 21 de septiembre, cuando Bruno y Mateo han estado de aniversario, cumpliendo su primera década de vida. Según ha dejado ver en su perfil de Instagram, ha habido una celebración doméstica, de la que ha publicado alguna imagen. En sus historias de Instagram se ha podido ver cómo han decorado lo que parece ser su domicilio familiar, con varios globos, unos en forma de diez por la edad que estrenan sus hijos, y una guirnalda con letras que rezan 'Happy birthday''.

Una de las mesas de su casa ha sido decorada a conciencia y uno de los detalles de esta ornamentación con motivo del décimo aniversario de los mellizos llama especialmente la atención. Se trata de uno de los platos que se han dispuesto en la mencionada mesa, que incluye una ilustración familiar. En ella aparecen la propia Raquel, subida en una especie de podio y con un vestido y, junto a ella, dos figuras más, que corresponden a los dos pequeños. El dibujo, en cualquier caso, parece representar un retrato familiar de hace años: los niños, ambos de pelo castaño y vestidos iguales en la ilustración del plato, son mucho más pequeños en la imagen.

Junto a las dos imágenes, Sánchez Silva ha incluido breves textos con los que da cuenta del gran cambio que han experimentado sus mellizos, evidenciando el contraste entre el mencionado dibujo y la realidad. "¡Celebrando la vida! Las tartas, las velas, los juguetes... ¡hoy soñaría con parar el tiempo! Atrapar este momento... ¡Cómo pasa el tiempo! Ya diez...", ha escrito junto a las instantáneas.

Bruno y Mateo, los hijos que Raquel Sánchez Silva siempre ha protegido

Lo cierto es que las imágenes de Bruno y Mateo son verdaderamente escasas, y se reducen a las tomadas en alguna ocasión por los paparazzi en alguna escapada familiar, pero Raquel no los exhibe nunca en el entorno digital (sí lo ha hecho, en alguna ocasión puntual su padre, Matías). De ellos habló en mayor profundidad cuando debutó en el mundo de la literatura infantil con un libro pensado para familias con gemelos y mellizos. En este sentido, la comunicadora reconocía en una entrevista para esta web que "ser mellizo no es fácil" y que había aprendido mucho de ellos "al escucharles llorar, al comprender sus celos, su soledad, su deseo de unicidad, su búsqueda de una identidad potente y distintiva y su amor", decía en 2019.