Los graves incidentes por los que los hijos mayores de Isabel Preysler, Chábeli, Julio y Enrique, casi pierden la vida
Los tres hijos de la socialité con Julio Iglesias, protagonistas de sus memorias, pudieron perder la vida en varios sustos familiares
La familia de Mario Vargas Llosa, "muy dolida" con la publicación de sus cartas a Isabel Preysler: así ha sido la reacción del clan
Dieciséis capítulos conforman 'Mi verdadera historia', el libro de memorias de Isabel Preysler, ya a la venta y que ella ha reivindicado como su verdad. Tras cinco décadas como rostro totémico del papel cuché patrio, en las que los periodistas no han dejado de perseguirla con sus preguntas, la socialité ha decidido, a sus setenta y cinco años, que tiene la edad necesaria para dar respuestas y repasar su vida. El contenido de la obra está siendo devorado ya por la prensa del corazón y del mismo forman parte algunos capítulos poco conocidos de su trayectoria: es el caso de lo que pudo suceder con sus tres hijos mayores, a los que estuvo a punto de perder, por distintas razones.
Durante su primer matrimonio con Julio Iglesias, en la época en la que pasó a ser un rostro reconocible para el público, la hispanofilipina se convirtió en madre en tres ocasiones. Fruto de su relación con el cantante llegaron al mundo tres de sus cinco hijos: Chábeli Iglesias, Julio Iglesias y Enrique Iglesias. Nacieron, respectivamente, en 1971, 1973 y 1975, y como ella misma reconocía en la rueda de prensa de presentación del libro en Madrid, son, junto a Tamara Falcó y Ana Boyer, el "pilar" de su vida.
Los tres hermanos Iglesias ocupan, de hecho, buena parte de la narración. Tienen un capítulo dedicado, el noveno, 'Chábeli, Julio y Enrique', en el que se repasan las trayectorias vitales y profesionales de los tres de forma cronológica, desde los embarazos y partos de su progenitora hasta su situación actual y su vínculo con ella misma y con el resto del clan. Parte del mencionado relato incluye episodios poco conocidos, como las complicadas tragedias que atravesaron y a las que lograron sobrevivir.
El grave accidente de tráfico que sufrió Chábeli Iglesias en California
En el caso de Chábeli, la primogénita de Isabel, se menciona el 20 de junio de 1999 como una fecha que querrían "olvidar para siempre". Junto a su pareja de entonces, el norteamericano James Miller, sufrieron un grave accidente de tráfico en California al salir a comer fuera: una señora mayor se saltó un stop y arrolló su coche. Chábeli salió disparada por el techo solar del vehículo, y fue ingresada de inmediato en la UCI. La familia entera, temiendo por su vida, viajó al país, donde se la encontraron con la pierna vendada y treinta y siete puntos en la cabeza. Afortunadamente, pudo recuperarse progresivamente con el paso del tiempo y tras una temporada en silla de ruedas.
El motivo por el que Julio Iglesias Jr. pudo no haber nacido
Con respecto a Julio, el mediano, la situación es distinta. Isabel pudo haberlo perdido, pero antes de que naciera. En el verano de 1972, Preysler no se encontraba bien. Creía que estaba embarazada pero su tía Tessie le decía que era imposible, ya que no le notaba nada al verla en bikini. Debido a unas molestias fue llevada a un hospital de Málaga, donde un médico le aseguró que había estado embarazada pero que había perdido al bebé y debían hacerle un legrado.
Su suegro, el doctor Julio Iglesias Puga, la quiso revisar antes de que se lo practicaran y dictaminó que no era preciso. Las molestias cesaron y en un par de meses la gestación comenzó a notarse. "Gracias a su gran profesionalidad no me hicieron el legrado porque, de haber sido así, Julio no hubiera nacido", reconoce ella. En el momento de dar a luz, los médicos resolvieron finalmente la duda: Isabel había perdido al mellizo de su segundo hijo.
El trágico episodio que protagonizó Julio Jr. en la piscina
Julio protagonizó otro suceso crítico. Ocurrió en su chalé de Guadalmar (en Torremolinos, Málaga), poco después de nacer su hermano Enrique, cuando tenía dos años. La familia disfrutaba en la piscina, e Isabel tuvo que entrar en la casa para coger un chupete para el recién nacido. El bebé lloraba y la madre de Preysler, Beatriz Arrastia, se asomó para estar pendiente de él. "De repente, se dio cuenta de que había una sombra en el fondo del agua y comenzó a gritar: '¡Julio se ha caído a la piscina!", recuerda.
Isabel salió corriendo, se tiró al agua y logró rescatar a su hijo, que estaba "luchando con sus bracitos para salir a flote". El niño se había quedado solo un momento, se resbaló y cayó a la piscina sin que su hermana Chábeli y una de sus tías se diesen cuenta: ambas habían seguido nadando sin percatarse de que el pequeño estaba hundido bajo ellas. Afortunadamente el niño se repuso, aunque durante mucho tiempo Isabel no dejó de pensar en "lo cerca que habíamos estado de perderle".
El susto de Enrique Iglesias cuando era un niño
También Enrique vivió una situación verdaderamente crítica. Tenía cuatro años cuando, también durante un verano en Guadalmar, su 'seño' preparaba un baño para los niños. El agua de la casa se calentaba, por entonces, con termos eléctricos que hacían que saliera "prácticamente hirviendo". La mujer cometió el error de abrir únicamente el grifo del agua caliente, dejando el de la fría cerrado. Jugando, Julio empujó a Enrique, que cayó dentro de la bañera.
"Oí un grito espantoso y cuando llegué vi que había salido de la bañera, que aún humeaba. Tenía toda la piel enrojecida y no paraba de llorar". Tras llevarlo al hospital, le confirmaron que tenía quemaduras de segundo grado y que se temía por sus riñones: si habían sido dañados se podía complicar gravemente su situación. Finalmente, y tras una "trágica" noche que el ahora cantante pasó totalmente vendado y con su madre junto a él, cantándole entre lágrimas, nuevas pruebas determinaron que estaba a salvo.