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El método con el que Adriana Dorronsoro adelgazó 20 kilos: “Decidí ordenar mi vida y cuidarme”

Adriana Dorronsoro cuenta cómo bajó 20 kilos y las críticas que recibe
Adriana Dorronsoro cuenta cómo bajó 20 kilos y las críticas que recibe. Divinity
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A Adriana Dorronsoro le faltan todavía unos meses para cumplir 40, pero ya vive ese cambio de década como un punto de llegada. Profesionalmente consolidada, serena en lo personal y segura de sí misma, la periodista se define sin complejos como alguien que está en su prime. Y, sin embargo, hay un tema que se ha impuesto con fuerza alrededor de su nombre: su cambio físico y los 20 kilos que ha adelgazado.

No es una intuición. Basta con mirar los resultados de búsqueda asociados a ella para comprobarlo. El antes y después se ha colado entre las primeras posiciones, junto a cuestiones tan recurrentes como la pareja o la maternidad. Por eso, cuando la invitamos a 'Las chicas de la cuarta planta', el formato de María Verdoy, sabíamos que la pregunta no solo iba a surgir, sino que era necesario contextualizarla.

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La cuestión no es cuántos kilos ha perdido ni cómo luce ahora, sino por qué su cuerpo se ha convertido en un tema de conversación pública. La propia Adriana lo resume con ironía cuando se enfrenta a ese interés constante: ha adelgazado y “quieren saber cómo lo ha hecho”. Así de simple… y así de complejo a la vez.

En la entrevista, deja claro que su proceso no nace de una exigencia externa. “No tuve ninguna presión ni laboral ni de ningún tipo”, explica, marcando distancia con uno de los grandes prejuicios que rodean a las mujeres que trabajan en televisión.

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El método con el que Adriana Dorronsoro adelgazó 20 kilos

Lejos de alimentar el titular fácil, Adriana habla de su adelgazamiento como el resultado de un cambio de hábitos progresivo, ligado a un momento de autocrítica personal. Reconocerse en rutinas que ya no le gustaban fue el punto de partida. A partir de ahí, tomó decisiones: reducir excesos, reorganizar su vida social, cuidar la alimentación y apostar por el ejercicio de forma constante.

Ella misma lo define como un proceso de orden más que de renuncia. “He ido ordenando mi vida”, comenta, insistiendo en que no ha dejado de disfrutar, pero sí ha aprendido a compensar. Un matiz importante en un contexto en el que abundan los discursos extremos.

La presión después del cambio

Uno de los momentos más llamativos de la conversación llega cuando Adriana reconoce que la presión no la sintió antes, sino después de adelgazar. Con el cambio físico llegaron los comentarios, las sospechas y las exigencias de explicaciones. Que si inyecciones, que si operaciones, que si “no contar la verdad”.

“La presión la noto más ahora”, admite, señalando una paradoja que conecta con un debate mucho más amplio: el cuerpo de las mujeres sigue siendo un territorio de escrutinio constante, incluso cuando el cambio responde a una decisión personal.

El adelgazamiento coincide, además, con un momento de estabilidad en su vida. Tras un divorcio complicado y cinco años de soltería que reivindica como necesarios para crecer, Adriana vive ahora una relación tranquila y se permite hablar de la maternidad sin dramatismos ni mandatos. En paralelo, su carrera profesional atraviesa una etapa de consolidación como copresentadora de 'Vamos a ver', junto a Patricia Pardo. Todo ese contexto ayuda a entender por qué este cambio no es solo físico, sino vital.

En 'Las chicas de la cuarta planta', Adriana Dorronsoro pone palabras a un proceso personal y, sobre todo, abrir un debate incómodo pero necesario sobre la edad, el cuerpo y las expectativas que siguen pesando sobre las mujeres cuando se acercan a los 40.

Dale play a los vídeos y descubre cómo Adriana cuenta el método con el que adelgazó 20 kilos, por qué ahora recibe más presión que nunca y qué reflexión deja sobre el momento vital que atraviesa.