David y Olivia, los hijos de Blanca Fernández Ochoa, sobre cómo vivieron la desaparición de su madre: "Sonaba raro"
David y Olivia han relatado en el paltó de 'De Viernes' cómo vivieron esos once días en los que su madre, Blanca Fernández Ochoa, había estado desaparecida hasta encontrar su cuerpo sin vida
La hija de Blanca Fernández Ochoa recuerda a su madre cinco años después de su muerte: "He abierto el dolor y la tristeza"
Blanca Fernández Ochoa fue una deportista olímpica con una amplia trayectoria y una vida ligada a la montaña y a su familia. El 24 de agosto de 2019 desapareció tras salir sola, y once días después su cuerpo fue localizado en la sierra de Guadarrama. La búsqueda movilizó a allegados, fuerzas de rescate y voluntarios. Sus hijos, David y Olivia, vivieron aquellos días con preocupación y espera, pendientes de cualquier noticia. Desde entonces, ambos han recordado lo ocurrido y el impacto que tuvo en su entorno más cercano.
Los hijos de Blanca Fernández Ochoa recuerdan la desaparición de su madre
David y Olivia Fernández Ochoa se han sentado en el plató de 'De Viernes' para relatar cómo vivieron esos once días en los que su madre estuvo desaparecida. Durante la conversación, recordaron que Blanca solía pasar periodos en la montaña y que, en un primer momento, pensaron que podía tratarse de una salida habitual. David explicaba que en su familia “eran conscientes de que lo mismo a veces se iba. Yo también lo hago. Me voy a la montaña dos días, haces vivac y vuelves”. Sin embargo, con el paso de las horas comenzaron a detectar señales distintas a otras ocasiones.
Olivia relataba que la falta de respuesta a sus llamadas fue el primer aviso. Contó que “hacía como tres días que no me respondía. Y ya dije, uy, raro. Pasaron cuatro y dije, llamada, llamada, llamada. Y al final dije, ¿dónde estás?”. Para ella, el silencio marcó un punto de alerta: “mi madre se iba a sus dos días, necesitaba desconectar, pero desconectar de tus hijos ya me sonaba raro. Nunca lo había hecho”.
David ha añadido otro elemento que hizo sospechar a la familia: los perros de Blanca. “Los primeros indicativos fue que dejó a sus perros, Choco y Trufa. Eran un pack de tres, a donde iba mi madre iban Trufa y Choco”. Ese detalle llevó a los hermanos a pensar que la situación no era similar a otras ausencias.
Ambos recordaron también el último encuentro antes de la desaparición. Olivia afirmó que aquel día transcurrió con normalidad: “nos fuimos a comer, nos fuimos a dar un paseo y la vi bien”. David señalaba que su madre no solía compartir sus preocupaciones y que “te veía, te recibía con una sonrisa, aunque después se iba a llorar. Nunca nos hizo partícipes de sus problemas”. Sobre los días de búsqueda, David aseguró que “yo lo recuerdo todo”, mientras que Olivia explicó que algunas escenas quedaron bloqueadas en su memoria: “yo estaba como en shock de decir esto no está pasando”.
Durante su intervención, ambos realizaron un llamamiento relacionado con la salud mental y con la importancia de hablar de estas cuestiones sin ocultarlas. David expresaba que “todo esto hay que normalizarlo muchísimo más”. Olivia subrayó que “una enfermedad mental es una enfermedad y hay que tratarlo como tal”.
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