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El uso del retinol o la vitamina C en verano, según tres expertas: "Hay que ajustar el modo de utilizarlos"

Mujer en la playa en veranoPexels
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El verano es tiempo de pausas, de descanso. El verano invita a llevar ropa más ligera, cambiar rutinas y pasar más tiempo al aire libre. Pero ¿qué ocurre con nuestros cosméticos en verano? ¿Sirve el mismo neceser que en invierno o conviene hacer pequeños ajustes? Bajo el sol, ciertos ingredientes requieren algo más de atención: no porque estén prohibidos, sino porque su uso puede necesitar matices.

Los cosméticos que conviene usar con cabeza

“En verano no hay ingredientes que estén estrictamente contraindicados, pero sí hay que ajustar el modo de usarlos”, explica la doctora Elena Jiménez, especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora. Uno de los grupos más relevantes son los retinoides, derivados de la vitamina A, habituales en tratamientos antiedad y para el acné. "Tanto el retinal como el retinol deben aplicarse solo por la noche y, si aparece irritación, conviene reducir la frecuencia o la concentración, pero no siempre es necesario retirarlos por completo”, aclara.

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Lo mismo sucede con ciertos ácidos exfoliantes, como los alfahidroxiácidos (AHA), presentes en muchos peelings. En palabras de la especialista: “No es lo más recomendable usar estos tratamientos más intensivos en verano si vas a exponerte al sol con regularidad. Lo ideal es reservarlos para épocas de menor radiación solar, como el otoño o el invierno”.

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La farmacéutica Belén Acero, experta en dermofarmacia, coincide: “Los AHA o BHA son efectivos, pero pueden dejar la piel más sensible. En verano es mejor optar por alternativas más suaves, como los PHA, que penetran de forma más superficial y resultan menos agresivos”. Como siempre, recomienda su uso por la noche y reforzar la fotoprotección al día siguiente. “La gluconolactona es ideal para quienes buscan una exfoliación ligera sin comprometer la tolerancia al sol”, apostilla la experta en dermocosmética y formulación, Ana Santamarina.

Manchas, sensibilidad y activos fotosensibles

Una de las preocupaciones más frecuentes en verano es la aparición de manchas. Y según la doctora Jiménez, no es ninguna casualidad. “Si un cosmético provoca irritación, como enrojecimiento, descamación o eritema, y además hay exposición solar, es más probable que aparezcan manchas. Por eso es tan importante seguir bien las instrucciones y adaptar su uso a cada piel y momento del año”.

Algunos ingredientes pueden aumentar la fotosensibilidad sin que el usuario lo sepa. La doctora menciona ejemplos habituales como el peróxido de benzoilo (común en tratamientos antiacné), algunos aceites esenciales como el de limón o bergamota, o incluso el ácido salicílico. “Estos activos pueden sensibilizar la piel al sol, así que lo más sensato es usarlos de noche y, durante el día, protegerse bien”. No así la vitamina C, que es un ingrediente totalmente seguro y un básico en cualquier neceser de verano.

La farmacéutica Belén Acero apunta además otros ingredientes a tener en cuenta: “La hidroquinona, utilizada para tratar hiperpigmentaciones, puede volverse contraproducente si no se combina con una buena protección solar. En verano es preferible sustituirla por fórmulas con ácido azelaico o tranexámico, que son menos irritantes y más seguros con exposición solar”.

¿Pausar o seguir?

La pregunta que muchas se hacen es si hay que dejar de usar ciertos productos en verano. “Algunos tratamientos intensivos sí conviene pausarlos por completo, como los peelings despigmentantes o los químicos más profundos”, responde Jiménez. “No porque sean peligrosos, sino porque requieren un control de la exposición solar que no siempre es fácil en esta época”.

Eso sí, según Raquel González, cosmetóloga y creadora de Byoode, hay que tener en cuenta que una cosa antes de dejar de usar un cosmético por miedo. “Lo primero es que tanto el retinol, como retinal y la vitamina C, por mencionar a alguno de los activos que despiertan más incertidumbre, es que son totalmente seguros. Y, lo segundo, es que en más o menos 60 días sin usarlos empezaremos a notar cambios drásticos en la piel. Por los ciclos de regeneración celular, este será el período estándar en el que todos los beneficios del retinol desaparecerán por completo”, concluye.

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