Qué mechas le quedan mejor al pelo castaño: 11 tonos que tienes que conocer
Las mechas aportan profundidad, brillo y movimiento, aclarando el cabello sin perder la naturalidad, pero la clave está en elegir el tono y la técnica adecuados
12 cortes de pelo para mujer que no hace falta peinar ni planchar
El cabello castaño es una base neutra, versátil y luminosa que admite una amplia gama de matices, desde unos reflejos sutiles, hasta contrastes más marcados. Las mechas son una técnica para aportar profundidad, brillo y movimiento, aclarando el cabello sin perder la naturalidad, pero la clave para un buen resultado está en elegir el tono y la técnica adecuados, según lo que se busca y las características personales.
Recientemente, Eugenia Osborne optaba por un cambio de look, tanto de corte, apostando por una melena midi con capas y flequillo largo para la que ha necesitado tirar de extensiones, como de color, apostando por un castaño más luminoso en un degradado ‘choco-miel’.
Lo cierto es que hay que ponerse en manos de profesionales porque el tono y la técnica de aplicación van a depender del efecto que se desea conseguir, así como del tono de la piel. Las opciones van desde un look natural como aclarado por el sol, hasta un estilo más sofisticado o moderno y la clave está en encontrar la armonía entre el color del cabello, el color de la piel y el de los ojos.
De manera resumida, si tienes un tono de piel cálido, apuesta por mechas de color cálido como el caramelo o el dorado intenso y si tienes la piel clara, opta por mechas de tonos fríos como el ceniza o el moka.
Mechas en tonos miel, caramelo o avellana
Si la idea es mantener la esencia del castaño, pero con un toque de luz, lo ideal son las mechas en tonos miel, caramelo o avellana. Estos colores aportan calidez y reflejos dorados que simulan el aclarado natural del sol, pero hay que evitar que haya una diferencia de más de dos tonos respecto al color de la base.
Estas mechas son perfectas para ojos verdes, miel o avellana y pieles cálidas, porque iluminan sin crear contrastes. Para un resultado natural se recomienda aplicarlas con técnicas como el balayage o las babylights, que crean un degradado suave y natural que no requiere retoques frecuentes, ya que la raíz queda difuminada.
Mechas en tono chocolate y moka
Para un look más sofisticado son perfectas las mechas chocolate o moka, con las que se consigue un acabado elegante sin alejarse del tono base, pero aportan densidad, profundidad y brillo a los castaños medios, resultando muy elegantes en pieles frías y ojos oscuros.
Para dar volumen a la melena, se recomienda aplicar estas mechas con técnicas como foilayage, que combina las balayage con la técnica del papel de aluminio, y lowlights, que mezclan mechas finas y reflejos oscuros, y combinarlas con un corte a capas que potencie el efecto 3D.
Mechas en tono arena, ceniza o caramelo rosado
Si lo que se busca es un cambio más visible se puede optar por los reflejos en color arena, ceniza o caramelo rosado, que no resultan estridentes, pero aportan un estilo más atrevido. Pruébalas si tu tono de piel es claro o frío y tienes los ojos azules o grises, porque estos matices equilibran el tono y ayudan a resaltar los ojos claros.
Para destacar los rasgos y enmarcar el rostro, lo ideal es realizar las mechas mediante la técnica del contouring capilar, aplicando las más claras en los mechones frontales, y peinar el cabello con ondas suaves para reflejar mejor la luz
Mechas cobrizas, ámbar o en dorado intenso
Si lo que se busca es un efecto cálido, pero vibrante, lo ideal es apostar por los reflejos cobrizo, ámbar o dorado intenso, porque añaden brillo y vitalidad al cabello. Estos tonos resaltan las pieles con subtono cálido, doradas o bronceadas, con ojos en color miel o verdes, iluminando y rejuveneciendo el rostro.
Para evitar contrastes y dar una apariencia natural de cabello aclarado por el sol, lo ideal es optar por técnicas como ombré o balayage, que concentran la luz en las puntas manteniendo la raíz oscura.
Te puede interesar
