Párpados caídos, zapatos que se salen..., 5 problemas ‘beauty’ y 5 soluciones fáciles

divinity.es 30/06/2015 16:06

A cada problema una solución, sobre todo si esa solución es sencilla y está a tu alcance. Parece ciencia ficción, pero el nuevo imprescindible para los párpados caídos no es más que una pegatina, si luego utilizas el rizador de pestañas térmico te cambiará la mirada. Luchar contra unos zapatos holgados era una batalla perdida, ahora podrás hasta correr con ellos y para los nuevos, atrévete a llevarlos sin medias y sin miedo a rozaduras.

Para los párpados caídos, Magicstripes

La blefaroplastia no es para todas, pero a ninguna mujer le gusta el efecto que producen en su mirada los párpados caídos, aunque existe un método no quirúrgico que levanta el párpado y literalmente agranda el ojo. Se llama Magicstripes y consiste en unas tiritas de silicona que se pegan en el pliegue existente entre el párpado móvil y el fijo, produciendo un efecto lifting inmediato. Los adhesivos son transparentes y quedan ocultos bajo el pliegue, además puedes maquillarte con normalidad, aunque es recomendable aplicarte la sombra dando pequeños golpecitos.

El rizador de pestañas térmico

A menos que seas una experta en cuestiones de maquillaje, es fácil que tengas un rizador de pestañas completamente olvidado. Parece un aparato siniestro que, además de pellizcarte el párpado, te arrancará las pestañas de cuajo. También es un clásico que el día que te decides a usarlo ya te has aplicado la máscara de pestañas y entonces ya has perdido tu oportunidad.

Para salvar estos escollos existe el rizador de pestañas térmico: funciona como un rizador para el cabello pero su temperatura sólo alcanza los 37(o). Su forma es similar a la de un pincel de rimell y basta sostenerlo sobre las pestañas unos segundos para que se ricen así nos lo explican desde ‘CMG make up artist’. Lo mejor, lo puedes usar una vez maquillada.

Borrador de arrugas

Muchos son los gestos que provocan las líneas de expresión y las arrugas, son inevitables pero indeseables. Existen tratamientos cosméticos que las atenúan, aunque no llegan a desaparecer a menos que te sometas a una intervención quirúrgica y en eso no todas las mujeres están de acuerdo.

Si lo tuyo no es la clínica prueba las nuevas bases ‘rellenadoras’ de arrugas formuladas con ácido hialurónico y retinol que proporcionan un efecto buena cara inmediato, y aunque su resultado desaparece al retirar el producto, su uso continuado mejora la apariencia de las arrugas. Para que hagan bien su trabajo es importante aplicarlas sobre tu tratamiento habitual y debajo del maquillaje.

El zapato que se sale del pie

Si las famosas son capaces de andar con zapatos de dos tallas más grandes que su pie, ¿por qué el resto de las mortales son incapaces de dar un solo paso? Porque el secreto no son ni las bolas de algodón en la punta, ni las almohadillas en el talón, lo que realmente funciona es fijar el pie al zapato.

Para solucionar este incómodo problema, la marca no shoe off ha creado unas mini plantillas de silicona, adhesivas por las dos caras que se pegan al zapato por un lado y al pie por el otro. Existen dos tipos: ‘rain drop’ que evitan que el zapato se salga por la parte trasera, perfecto para los zapatos de salón y ‘tulip hearts’ para evitar que se deslice por la parte delantera, muy adecuado para las sandalias.

‘Spray’ efecto medias

Hay muchos motivos por los que no llevar medias se ha convertido en algo más que una moda aunque la mayoría son razones estéticas. Pero unos zapatos nuevos pueden dejar huella en tus pies si no tomas precauciones: ampollas, rozaduras, rojeces y heridas son el trofeo de tus pies cuando, cada año, comienza el verano.

Si las medias no entran en tu vocabulario estival, el spray efecto medias es un aliado perfecto para domar tus zapatos. La zapatera Sara Navarro ha creado junto a la marca Kiwi (la del betún) una línea llamada ‘shoe passion’ que, entre otros productos, comercializa ‘pies de seda’ un spray que envuelve el pie en una especie de velo que lo protege de rozaduras y de la fricción de los zapatos.