El negocio de ser famosa con kilos de más

Carlos Otero 22/02/2013 11:25

Muchas veces hablamos de mujeres con curvas, con moderado sobrepeso o rellenitas. Hoy nos vamos a dejar de eufemismos y nos vamos a centrar directamente en famosas gordas. Así, con todas las letras y sin complejos. Porque precisamente estas mujeres han hecho de sus kilos de más una “marca de la casa”, un valor añadido y hasta una fuente de negocio y un modo de vida.

El éxito mediático, social y profesional de Caritina Goyanes pasa por sus kilos. La hija de Cari Lapique tiene un blog en la web de la revista Telva titulado “A mi manera” que, según su subtítulo, trata de enseñar “cómo tener estilo más allá de la Talla 38”. En él, Caritina ofrece a sus lectoras trucos de belleza, consejos de estilo y direcciones de shopping.

La cantante británica Adele también debe parte de su éxito a su figura. Sus formas rotundas (mide 1,75 y pesa alrededor de 77 kilos) resultan tan representativas como su voz. Ella lo ha explotado de cara a la opinión pública, logrando así que muchas mujeres con el mismo físico la tomen como referente. "Nunca he querido parecerme a los modelos de las portadas de revistas. Tengo un cuerpo que representa a la mayoría de las mujeres y estoy muy orgullosa de ello", dice. Con este tipo de declaraciones Adele consigue que muchas mujeres acudan raudas y veloces a comprar sus discos para sentirse identificadas con las canciones de esta gran cantante.

Teté Delgado ha hecho de sus kilos de más un medio de vida. La actriz gallega no se pierde un debate, una tertulia o un saloncito televisivo en el que pueda defender las bases de la “gordita feliz” y, de paso, llevarse a casa unos buenos euros. La última película de la actriz del paradójico apellido se llama “Gordos” y los papeles que representa siempre tienen el sobrepeso como eje vertebrador. Si un día adelgaza, Teté pasaría a engordar las listas del paro.

El mundo de los concursos de belleza también tiene su icono de gordura. La venezolana Alicia Machado no sólo ganó en 1996 el preciado título de Miss Universo, sino también 18 kilos. Tan gorda se puso durante su reinado que el multimillonario Donald Trump, propietario de la marca Miss Universo, llegó a firmar su carta de despido. Desde entonces ha transformado aquel problema en su carta de presentación haciendo así de su drama, su negocio.

La historia de Kirstie Alley es parecida. ¿Cuántos años llevamos los periodistas de celebrities hablando de sus campañas públicas sobre su peso? Los kilos de mas de la actriz pasaron de motivo de sus preocupaciones a su mayor fuente de ingresos: La ex camarera de ‘Cheers’ ha protagonizado realities, desfiles, campañas y portadas con sus kilazos de más como hilo conductor.

Christina Aguilera también ha sabido rentabilizar sus kilos de más: la cantante americana ha pasado de “bomba sexual” a “bomba calórica” con mucha dignidad. Muchas de sus canciones versan sobre la autoafirmación del físico aunque su nueva figura le costó al principio de la metamorfosis algún que otro contrato: "Me dijeron que el hecho de que yo hubiese ganado tanto peso estaba afectando a mucha gente como los productores, los directores musicales… Yo les digo 'si, trabajáis con una artista gorda, ¡asumidlo!', a veces debes recordarles que no les perteneces, es mi cuerpo, no el suyo".

Ellos, también

Los kilos de más como modo de vida y tarjeta de presentación no son algo exclusivo de las mujeres. También encontramos casos de hombres que tienen en sus kilos de más gran parte de su esencia y de su éxito, siguiendo la estela marcada desde el siglo XV por Sancho Panza.

Estoy convencido de que si Falete fuese un figurín perdería gran parte de su encanto. A los seguidores del ‘Lady Gaga de la copla’ nos gusta la imagen excesiva y redonda del artista. Lo mismo podríamos decir de ‘King Africa’, si fuese delgado no sería lo mismo.

En Hollywood el mejor ejemplo lo tenemos en el actor que hacía de Hurley en ‘Perdidos’, Jorge García. Su físico desmedido le abre las puertas para papeles exclusivos para él como el que representaba en la famosa serie de Cuatro. Tras su final, uno de los productores de ‘Lost’ J.J. Abrams, lo convocó para protagonizar ‘Alcatraz’ También ha hecho alguna que otra aparición en varias series como ‘Fringe’ o ‘Cómo conocí a vuestra madre'