Ramos de novias con girasoles: seis ideas originales para el gran día

El ramo de novia es, posiblemente, el último detalle que vas a elegir para tu look de boda y, al mismo tiempo, es uno de los más especiales. El ramo aporta color, romanticismo y desprende tanta personalidad como el vestido o el peinado que lleves. Las posibilidades de combinar flores son infinitas, y si ya has iniciado alguna búsqueda, es posible que no sepas por qué tipo de ramo decidirte. Y lo entendemos, porque hay verdaderas maravillas. Puede que esto te ayude a elegir, o quizás te confunda aún más, pero los ramos de novia con girasoles son originales y bellísimos. 

Elegir girasoles para formar tu ramo de novia es un acierto, sobre todo si la boda se celebra en el campo, porque remiten a la naturaleza con una fuerza como pocas flores tienen. Vistosos, grandes y de un amarillo espectacular, los girasoles simbolizan el amor, la felicidad y la admiración. También la buena suerte y una larga vida, algo que se celebra y se desea en una boda, sin lugar a dudas. No te pierdas estos ramos de novia con girasoles tan bonitos que pueden servirte de inspiración para elegir el que llevarás en tu gran día. 

Comenzamos por la apuesta más clara por hacer el girasol el protagonista absoluto del ramo. Sencillo y rotundo, es como bajar el sol a tus manos en un día tan importante. 

Enamoradas estamos de este ramo, en el que la combinación de los girasoles con el eucalipto y la lavanda es sencillamente perfecta. Por no hablar del sensacional olor que debe desprender durante todo el día. 

Como si el mismo sol naciera entre las rosas, este ramo tan original rompe con el blanco del ramo de una forma de lo más original. 

Los ramos con colores otoñales son una delicia. Las combinaciones de colores ocres, rojizos, anaranjados y amarillos es espectacular. Y, por supuesto, no podían faltar los girasoles. 

Esta propuesta de ramo es super acertada. Los girasoles son los grandes protagonistas, y haciéndoles compañía la belleza, blancura y sencillez de las margaritas. Y es que ambas flores se llevan de maravilla y quedan juntas así de bien. 

La mezcla de estos dos colores es toda una sorpresa y en un ramo de novia son ideales. Si la belleza del girasol le sumas rosas de color rosa, que son puro romanticismo, y añades alguna blanca para combinar con el color del vestido, triunfarás.