El pasado mes de marzo, Carolina Molas hizo público un comunicado en el que explicaba su deseo de seguir siendo una persona anónima a pesar de la relevancia mediática que su hijo ha ganado en los últimos años. Desde que comenzó una relación sentimental con Tamara Falcó, el empresario se ha convertido en un personaje público y su fama ha afectado de forma directa a su familia. Un papel que vieron aún más intensificado cuando saltó a la luz la deslealtad del empresario a la hija de Isabel Preysler, ya que la madre y los hermanos de Íñigo Onieva se encargaron de defenderle públicamente.
En el documento que hizo llegar a los medios de comunicación, la madre de Íñigo Onieva denunciaba "la persecución y hostigamiento que ha venido sufriendo los últimos meses". Mantenía que "es y siempre ha sido una persona privada, absolutamente celosa de su intimidad y la de su entorno". Y por todo ello pedía a la prensa que "se abstenga de publicar y/o difundir informaciones y/o imágenes" sobre ella y su entorno.
Por todo ello, Carolina Molas tomó hace unos meses la decisión de no participar en la exclusiva que Íñigo Onieva y Tamara Falcó darán de su boda. La madre del empresario se negaba en rotundo a salir en las fotografías que se harán públicas a través de una revista. Sin embargo, tal y como puedes ver en el vídeo que encabeza esta noticia, Carolina Molas ha cambiado de idea. La suegra de Tamara Falcó ha decidido, finalmente, que su imagen sí podrá aparecer en las fotografías del reportaje de manera natural, sin necesidad de posar. También lo harán sus otros dos hijos, Alejandra y Jaime, hermanos de Íñigo Onieva.
Según adelantaba Vanitatis, en el palacio El Rincón, el lugar en el que se celebrará la boda, habrá dos equipos de fotógrafos. Uno de ellos será de caracter familiar, contratado por los novios, para tener imágenes de su gran día que guardarán en la intimidad. Por otro lado habrá un equipo de la revista a la que darán la exclusiva. La diferencia entre ellos es que el segundo sí necesitaba autorización para hacer públicas a posteriori esas imágenes.
Consciente de la "incomodidad" que implicaba negarse a aparecer en la exclusiva, la madre de Íñigo Onieva ha cambiado de opinión y sí ha dado el permiso para ser fotografiada. Tal y como puedes ver en el vídeo que encabeza esta noticia, Carolina ha explicado que ha tomado esta decisión "para que sea una boda normal y no haya situaciones incómodas para nadie". "Quiero seguir siendo lo que soy, una persona anónima. Es mi hijo el que se casa con Tamara", repetía sobre su petición a los medios de comunicación. En palabras de Molas, "toda la familia se comportará como una familia en una boda, no hay más vueltas que darle".
Según el medio citado anteriormente, Carolina "no percibirá ningún tipo de retribución económica" por aparecer en la exclusiva y su participación "tampoco aumentará" la cantidad que recibirá el matrimonio.