Estela de Suecia, la princesa más simpática y risueña de Europa: así es su vida como heredera al trono

Ser princesa no siempre es fácil. Cuando entran en la madurez cada uno de sus pasos y obligaciones son observados y analizados al dedillo y cuando se encuentran en su infancia se comienza a hacer una radiografía de cómo es su comportamiento y qué actitud podrán tener cuando se hagan con el trono de su país. Y esto es algo que parece darle igual a Estela de Suecia.

Estela de Suecia cumplirá diez años en febrero

La pequeña, que el próximo 23 de febrero cumplirá 10 años, se ha convertido en la alegría de su familia. Es hija de Victoria y Daniel Westling, quienes contrajeron matrimonio en 2010, en un boda muy controvertida, ya que él era su entrenador personal.

Estudia en un exclusivo colegio concertado de Estocolmo

A pesar de lo pequeña que es, Estela ostenta ya dos títulos, como princesa de Suecia y, también, como duquesa de Östergötland. Además de su tratamiento como Alteza Real. Su hermano, Óscar, vino al mundo cuatro años más tarde, en marzo de 2016.

La feliz familia vive en el Palacio de Haga de Estocolmo, donde sus padres desarrollan sus funciones como herederos a la corona, mientras que Estela y Óscar intentan llevar una vida lo más normal posible. Además, la pequeña acudió a una escuela Montessori y, ahora, desarrolla su vida escolar en el Campus Manila, un exclusivo colegio que fue de lo más polémico, debido a su alto precio y a que se trata de un centro concertado.

Estela es una niña simpática y risueña

Cada vez que sus padres comparten una imagen de Estela podemos ver a una niña simpática y risueña. La casa real sueca tiene por costumbre subir una fotografía de sus vástagos el día de su cumpleaños. Así, cuando cumplió nueve años pudimos ver a la pequeña muy sonriente junto a su hermano y su pequeño perrito, Rio, del que disfruta en los jardines del Palacio de Haga.

Es una apasionada del esquí y de los caballos

Eso sí, la pequeña ha tenido algún que otro problema de salud en los últimos tiempos. La joven princesa no comenzó el 2020 de la mejor forma, ya que se rompió una pierna practicando uno de sus deportes favoritos: el esquí. Y, además de este deporte, la princesa de Suecia es una gran amante de los caballos.

Así, siempre que la vemos, Estela está con una sonrisa. En todas las apariciones, tanto en sus cumpleaños como en sus momentos más especiales con su familia, la joven se muestra risueña, espontánea y divertida.