Roberto Leal muestra su renovada cocina tras la reforma: "Espacios para la vida en familia"

Este 2022 se cumplirán dos años desde que Roberto Leal se mudó a su actual casa, situada en la zona norte de la capital. Un chalé que el presentador y su mujer, la periodista Sara Rubio, se compraron antes del inicio de la pandemia, pero en el que no se instalaron hasta que llegaron los meses de verano. En él hemos podido ver al andaluz ampliar la familia, con la llegada del pequeño Leo, que recientemente ha cumplido su primer año de vida. La vivienda, amplia y muy luminosa según lo que ha mostrado Leal en sus redes sociales, cuenta con jardín propio y piscina. Y ahora, ha remodelado parte de la misma: así es por dentro la nueva cocina de Roberto Leal tras una profunda reforma.

El salón o los exteriores del hogar de los Leal-Rubio son algunas de las zonas que mejor conocen sus seguidores, donde suele aparecer junto a Leo o Lola, su hija mayor, que cumplirá cinco años este verano. Y puntualmente también han aparecido imágenes en su Instagram de la cocina. En ella ha sido donde el de Alcalá de Guadaíra forja su buena forma física: más allá de sus intensos entrenamientos en el gimnasio, juegan un papel importante su cuidada alimentación y la apuesta por el ayuno intermitente de forma temporal.

Recientemente el presentador se ha rodeado de un equipo de profesionales, también alcalareños, para acometer un proyecto de reforma en su cocina. Y, una vez lista, ha mostrado el resultado en su perfil de Instagram. La habitación ofrece una imagen renovada, con un estilo minimalista y toques de estética nórdica y hasta industrial. Leal ha destacado la innovación, la calidad, el diseño único y, especialmente, la creación de "espacios pensados con cariño donde vivir la vida en familia".

El espacio es una de las grandes características del nuevo aspecto de la estancia. La cocina es ya de por sí un lugar especialmente amplio, pero esto se ha visto reforzado por la distribución actual. Mientras el mobiliario y los electrodomésticos se concentran a lo largo de tres de las cuatro paredes del cuarto, la zona central queda completamente liberada de enseres, lo que aumenta la sensación de espaciosidad.

Desde la perspectiva de la entrada de la cocina, la pared del fondo es donde se sitúa el fregadero, y contigua a esta en su lado izquierdo, se distribuyen la vitrocerámica y la campana extractora, de color negro. En esta zona dedicada al cocinado hay mucho espacio para trabajar, y espacios de almacenamiento en la parte baja. Continuando por dicha pared, se reparten el resto de los electrodomésticos, todos integrados, varios armarios, y otro espacio con la cafetera o la tostadora. De la pared opuesta cuelga un televisor y ya cercana a la entrada se sitúa una mesa con un par de sillas.

A ello contribuye otra de las cualidades de la renovada cocina: la luminosidad. Lograda mediante la combinación de colores, fundamentalmente blanco y gris, salpicada de toques de negro. El primero es uno de los principales protagonistas, presente en el techo y las paredes más pequeñas del cuarto, así como en los armarios, en la encimera, la mesa o en algunos de los espacios de almacenamiento. El gris es el color del suelo, el de ciertas partes de las paredes más amplias y otros detalles, como el armario que oculta el termo.

Pero a mayores de las tonalidades claras utilizadas, la cocina gana en claridad debido a su apertura al exterior. La pared del fondo cuenta con una ventana de dos cuerpos, con vistas al jardín, y la pared opuesta, también con cristal, se abre hacia la impresionante escalera de la vivienda. Pero uno de los principales atractivos es el techo de la misma, que cuenta con parte cerrada en color blanco, y de una parte abierta mediante una cristalera, lo que permite que se filtre gran cantidad de luz natural. A mayores, se añaden dos lámparas colgantes de estética vintage.