Así es el jardín de Ana Boyer en Madrid: exclusivo y conectado con la mansión de Isabel Preysler

MadridAunque sea una enamorada de España y Madrid, Ana Boyer lleva ya varios años viviendo en Doha, junto a su marido, el tenista Fernando Verdasco, y sus dos hijos. Lugar en el que han construido una vida lejos del foco mediático que rodea a la familia Preysler en nuestro país. Sin embargo, cada vez que regresa a Madrid, hay un sitio al que vuelve como a su refugio personal: la casa de su madre, Isabel Preysler.

Aunque muchas veces se habla del "jardín de Ana Boyer", lo cierto es que este espectacular espacio verde forma parte de la emblemática mansión de Isabel Preysler en la exclusiva urbanización de Puerta de Hierro. Es allí donde Ana disfruta de sus días de verano, en un entorno elegante, íntimo y pensado para el descanso. Y es a través de su perfil de Instagram, donde acumula más de 356K seguidores, la forma con la que tenemos acceso a algunas de las imágenes más cuidadas de este oasis madrileño.

Un jardín con historia... y mucho estilo

La vivienda de Isabel Preysler está situada en una de las zonas más lujosas de Madrid. La propiedad cuenta con más de 5 000 metros cuadrados de parcela (de los cuales aproximadamente 2 000 están construidos) y ella misma la compró hace más de tres décadas.

Aunque en la residencia no tienen problemas de espacio, el jardín ocupa una porción considerable del terreno y se ha convertido con el tiempo en uno de los rincones más apreciados tanto por la familia como por los seguidores de Ana, que no duda en compartir imágenes de sus momentos más relajados allí: tumbada al sol, tomando un café en la terraza, o disfrutando con sus hijos cerca de la piscina.

Zona chill-out, piscina y mucha vegetación

Uno de los puntos fuertes es su zona chill-out, que parece sacada de una revista de decoración. Ana ha mostrado en varias ocasiones los sofás blancos con cojines de estilo ibicenco, las mesas bajas de madera natural y los toldos que dan sombra durante las horas más calurosas del día. Y es que todo está pensado para disfrutar del aire libre sin renunciar a la comodidad ni al estilo.

La piscina exterior es otra de las joyas del espacio. De tamaño generoso, rodeada de césped perfectamente cuidado, tumbonas y vegetación abundante, se convierte en el epicentro de la actividad familiar en verano. A esto se suma una segunda piscina interior, cubierta, perfecta para los días más fríos o para practicar algo de deporte sin salir de casa.

Un oasis privado en plena ciudad

La intimidad es clave en este jardín. Rodeado por setos altos y vegetación frondosa, está diseñado para que nadie pueda ver desde el exterior. Esa privacidad es uno de los aspectos más valorados por Ana y su familia, que pueden relajarse sin preocuparse por miradas ajenas o cámaras indiscretas.

Mucho más que un jardín

Aunque Ana Boyer se muestra siempre discreta en los medios, en su cuenta de Instagram sí deja ver pequeños fragmentos de su vida cotidiana, y el jardín de la casa de su madre es uno de los escenarios más frecuentes. Allí celebra cumpleaños, reencuentros familiares, momentos de lectura y, por supuesto, sus ratos de juego con sus hijos. También ha aprovechado este enclave para rodar campañas publicitarias y colaboraciones con marcas de todo tipo.

No hay duda de que el jardín de la casa de Isabel Preysler no solo es un espacio bonito; es también un símbolo del estilo de vida de su familia. Para Boyer, representa ese rincón de Madrid al que siempre regresa cuando necesita reconectar con sus raíces.