La Flor de Pascua o Poinsettia y otras plantas que son tóxicas para perros y gatos
La plantas llenan el hogar de vida, pero es importante que no sean peligrosas para las mascotas
10 plantas de interior resistentes y muy fáciles de cuidar
Las plantas son una manera estupenda y natural de añadir color y vida a nuestros hogares, un pequeño detalle (que puede no ser tan pequeño) que consigue revitalizar casi cualquier estancia. No hay habitación que no mejore su energía al sumarle una planta, incluso en aquellas en las que nos sentimos más reacios a hacerlo, como el baño o la cocina.
Para que la casa luzca bien y las plantas crezcan fuertes y sanas, es importante encontrar aquellas plantas que mejor se adapten a las condiciones que tenemos en nuestro hogar. Hablamos de luz, de humedad e incluso de corrientes de aire, pero en caso de tener una mascota, es de vital importancia que metamos en casa las plantas que sean seguras para ellos, en ocasiones de manera literal.
La Flor de Pascua o Poinsettia y otras plantas que son tóxicas para perros y gatos
Muchas de las plantas que tenemos en casa son tóxicas para perros y gatos, en ocasiones su consumo puede producirles malestar y vómitos, pero en otras puede costarles la vida. Por eso, antes de meter en casa una planta, asegúrate de que es segura para todos los habitantes de la misma. Estas son algunas de las plantas que son tóxicas para ellos:
- Flor de Pascua. Esta planta llena nuestra casa de color en Navidad, pero no conviene tenerla si tenemos mascota porque contiene látex lechoso en sus hojas, tallos y raíces, que es irritante para perros y gatos si la ingiere o entra en contacto con ella. No suele ser letal, pero sí es molesta y preocupante.
- Poto. Es una planta sencilla de cuidar, lo que hace que sea habitual en las casas. Sin embargo, sus hojas contienen oxalato cálcico, lo que les provoca inflamación, irritación, y vómitos, entre otros síntomas.
- Aloe. De esta planta solo les resulta tóxica su salvia porque contiene saponinas y antraquinonas, sustancias que les provocan vómitos, diarrea o dolor abdominal, entre otros males.
- Kalanchoe. Esta planta les resulta tóxica al completo, tanto las hojas como las flores, especialmente estas últimas. Puede provocarles vómitos, diarrea, temblores y llegar a afectarles al corazón, provocando taquicardia.
- Geranio. Se trata de una planta muy común, principalmente por sus bellas flores, pero en las casas con perros o gatos es mejor evitarla porque provoca dermatitis de contacto. También debilidad, incoordinación, temblores…
- Ficus. Contiene psoralenos, lo que en estas mascotas provoca vómitos y diarreas.
- Begonia. En este caso solo las raíces son tóxicas, por lo que no se trata de un riesgo tan elevado tenerla en casa. Su consumo les produce ardor en labios y boca, pero también vómitos y problemas al tragar.
- Acebo. Esta es otra de las tradicionales plantas de Navidad y también es mejor evitarla. Sus hojas y frutos contienen saponinas, que provocan síntomas gastrointestinales y en los casos más graves, la muerte.
- Dracena. Igual que otras, esta planta también contiene saponinas, que pueden provocarles vómitos, hipersalivación y midriasis (contracción pupilar).
Esto es solo una pequeña muestra, hay muchas plantas donde escoger y por eso lo mejor es consultar si la que nos ha gustado es segura antes de llevarla a casa, sobre todo en Navidad porque son tóxicas la Flor de Pascua y el acebo, pero también el muérdago.
