Muebles de lujo, luz natural y en el centro de Valencia: la casa a la que se ha mudado Marta Lozano

Las redes de las influencers se nutren con su día a día, sus outfits o sus rutinas de belleza. Pero si hay algo que genera especial curiosidad en sus seguidores son sus casas, esos hogares en los que han pasado más tiempo que nunca en los últimos meses y que suelen presentar en house-tours detallados o dejar entrever como photocall en algunas de sus publicaciones. Conocemos ya la vivienda que Ana Moya acaba de comprar, o la "casa de los sueños" de María Pombo, que puedes ver en el siguiente vídeo. Y ha llegado el turno de saber cómo es por dentro el piso de Marta Lozano.

La valenciana ha dado un cambio a su vida: en enero de este mismo año estrenó su nuevo piso, una vivienda situada en el centro de Valencia que cuenta con 155 metros cuadrados. Para Marta es un paso importante, ya que se trata de la primera vez que vivirá junto a su chico, el odontólogo Lorenzo Remohi, con quien mantiene una relación desde hace cuatro años. Hasta entonces, Lozano vivía con sus padres y su hermana Meri Lozano, también influencer, en una vivienda que pudimos conocer algo mejor durante el confinamiento de la pasada primavera.

A finales de enero Marta anunciaba el inicio de esta etapa en sus vidas con una imagen en la que su chico la sostiene en sus brazos, desde su recién estrenado nuevo hogar, sin demasiada decoración todavía. La influencer reconocía entonces morirse de la ilusión, pero admitía también que sentía pena al despedirse de su casa familiar y del cuarto que durante años compartió con su hermana Meri.

"No sabéis qué cúmulo de emociones siento ahora mismo, ¡deseadme suerte!", pedía a sus seguidores. Su pareja compartía la misma foto unos días después asegurando que ya había habido cambios: "Las paredes empiezan a tener vida, los espacios dejan de ser vacíos, y el añorado calor de hogar empieza aparecer", reconocía. Ahora, unos meses después, las redes de ambos han servido para que conozcamos el interior de su nueva casa tras las semanas de adaptación.

La céntrica vivienda cuenta con una importante nota característica: la luminosidad presente en cada uno de los espacios. Una cualidad que se consigue mediante la abundancia de luz natural que entra por las muchas ventanas y balcones de la casa, y se refuerza mediante la apuesta por los tonos blancos en paredes, techos, contras y parte del mobiliario. Además, en lo relativo a la decoración, a cargo de una empresa valenciana, se tiende a una estética tipo nórdica, con muchas notas de cuero y piel.

Estas notas comunes se reflejan perfectamente en la estancia principal de la casa: el amplio salón-comedor, en el que ha habido varios cambios desde las primeras fotos compartidas por Lozano. Se trata de un espacio grande y abierto, en el que se distinguen dos zonas diferenciadas, con suelos en madera clara.

La correspondiente al salón, iluminada por un amplio ventanal con cortinas blancas, tiene los sofás beige en forma de ele y una gran alfombra en gris. En el centro, varias mesas bajas redondas de distintas alturas y diseños, y un par de sillones en cuero y madera. Al fondo se distingue un gran espejo con marco de cerezo apoyado contra la pared, y varias plantas.

La zona del comedor está presidida por una gran mesa alargada de color negro, rodeada de cuatro sillas en gris. Una lámpara en tono oscuro cae sobre la mesa, y de la pared del fondo de la habitación cuelga un cuadro abstracto con varios colores y formas geométricas. Se puede apreciar que la estancia no está cerrada, solo dicho muro la separa del espacio contiguo.

El dormitorio es otra habitación que juega con los tonos claros y la madera. En una de las imágenes publicadas en forma de carrusel por Marta, se puede ver en detalle a través del reflejo en un amplio espejo con marco dorado presente en la estancia. La cama de matrimonio, con ropa en distintos tonos claros de hueso y gris perla, está cubierta de cojines de distintas formas y tamaños. Tras el lecho, un gran armario empotrado en blanco, que incluye varios módulos y un estante con libros. A los lados, sendas lamparitas y mesillas cilíndricas de madera. Bajo el espejo se intuye una mesa o una cómoda con otra fuente luz y varias publicaciones de moda encima. El cuarto cuenta además con vestidor.

Del resto de estancias no ha trascendido demasiado. En otra de las imágenes de la cuenta de Marta se puede ver una zona acondicionada a modo de despacho, frente a uno de los balcones, con un escritorio de madera tapizada en piel y valorado en más de 700 euros. Además, hemos visto algún rincón más de la casa, siempre con abundancia de blanco, madera y plantas. Lorenzo ha dejado ver también en su Instagram cómo es la zona de la casa destinada a la colada.