La casa de Miki Nadal en Madrid: luminosa, de estilo clásico y con un dormitorio de ensueño

Miki Nadal suele ser celoso de su vida privada, y la intimidad de su hogar forma parte de ella. Al humorista, que se mudó a Madrid hace décadas, le gusta volver de vez en cuando a Pedrola, el pueblo de Zaragoza en el que vivió durante sus primeros cinco años de vida, y donde vivía su madre Justa, fallecida el pasado mes de febrero. También pasar tiempo en Altea, el lugar de sus veranos familiares y donde disfruta ahora con su hija Carmen. Pero la vivienda del presentador se encuentra en la capital: repasamos cómo es por dentro la casa en la que vive Miki Nadal.

Hasta 2019, Miki vivía con la tiradora olímpica Carola Escámez, con la que mantuvo una relación sentimental durante un lustro. En 2015 nacía Carmela, la única hija del matrimonio, que en primavera cumplió seis años. Pero en 2019 la pareja se separó, con condena de por medio al humorista por un delito de vejaciones leves a Escámez, y Nadal se mudó a una vivienda en el madrileño barrio de Sanchinarro. El divorcio no se firmaría hasta este pasado febrero, tras meses de litigio y cuando el cómico ya había iniciado una relación con Helena Aldea.

Según lo publicado en algunos medios, en septiembre de 2020 Miki se volvió a mudar y esta vez contó con la ayuda de su pareja actual para mover sus pertenencias a su nuevo hogar. Con Helena le hemos visto recientemente hacer un viaje de parejas a Copenhague junto a sus amigos Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz, que se mudaban también a la urbanización La Finca por las mismas fechas que el aragonés.

De la casa de Nadal se sabe más bien poco: la intimidad de su hogar forma parte de esa esfera personal que suele resguardar del foco mediático. Y a diferencia de otros muchos vips, ni siquiera la época del confinamiento de la pasada primavera facilitó especialmente que sus seguidores conociesen su vivienda de entonces. Esas semanas provocaron que las celebrities pasaran más tiempo que nunca en casa, y que por tanto esta apareciera en mayor medida en sus publicaciones. Pero no fue el caso de Nadal, que apenas compartió imágenes durante dicha etapa.

Fue durante otra situación que hizo a medio Madrid volver a confinarse cuando su público pudo conocer algo mejor su nuevo hogar: durante la tormenta Filomena, en enero del año pasado. Entonces, Miki publicó un par de imágenes que, sumadas a otras que ya había compartido, nos permitieron hacernos una idea de cómo es su casa. La luminosidad, el predominio del blanco y el estilo clásico son las principales notas comunes en el interior y el exterior de la vivienda.

El salón es una de las estancias más destacadas de la misma, que pudimos conocer gracias a una fotografía del actor durante dichas nevadas. El cuarto, que cuenta con suelo de madera pulida en tono cerezo, se abre al exterior, a lo que parece ser la calle o una zona arbolada, a través de dos grandes ventanales blancos. El balcón, completamente cubierto por la nieve entonces, cuenta con una imponente balaustrada clásica de piedra en tono claro.

El dormitorio principal es otro de los cuartos que sus fans pudieron conocer entonces. Y por la imagen cumple también con las características comunes de la vivienda. Miki sacaba la foto desde la cama, resguardado del frío, mostrando el panorama exterior gracias al elegante ventanal de tipo inglés situado frente a la misma. Tres grandes ventanas en blanco, con estores en el mismo tono, que contrastan con el gris perla de la pared. La ropa de cama, por lo que se ve en la imagen, es también de color blanco.

Pero no solo hemos podido conocer las estancias principales: Miki también ha compartido alguna instantánea de rincones especiales de la vivienda. El mejor ejemplo tuvo lugar el pasado Día del Padre, cuando Nadal publicó una imagen de los regalos que le había preparado su hija, colocados sobre una mesita negra. Dos manualidades que mostraba con orgullo: un cubilete para guardar bolígrafos y una tarjeta dedicada, con forma de camisa y corbata. "Porque me enseñaste a ser como soy, con un beso fuerte las gracias te doy. Te quiero", rezaba el texto. "Lloro", añadía Miki.