{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
No son muchas las artistas que deciden arriesgarse y cambiar de look a lo largo de su carrera. La mayoría de ellas se mantienen, durante años, cómodas con una estética y un estilo, donde saben que triunfan. Por eso, ser camaleónica y evolucionar es muy valorado por el público. Un claro ejemplo ha sido siempre la cantante Rihanna, a quien hemos visto con innumerables cortes y colores de pelo: desde el 'garçon', pasando por el bob y terminando con una melena de infarto. Lo cierto es que, de esa adolescente a la que conocimos con 19 años y que triunfó con Umbrella, poco queda. Rihanna ya ha pasado los 30, aunque sigue con la misma ilusión con la que empezó, arriesgando y dejándose la piel por mantenerse en el top del mundo de la música.
Durante todos estos años, la carrera de Rihanna se ha expandido más allá de la música y, además de su dedicación a labores humanitarias, también ha sacado su propia línea de cosméticos. Hasta el momento, todo lo que toca se convierte en oro, en éxito asegurado. Probablemente esto es gracias a la facilidad que tiene para adaptarse a todos los entornos, para saber qué es lo que quiere su público y saber cómo dárselo.
Pero volvamos a sus looks, ¿cómo ha cambiado Rihanna durante estos más de diez años de carrera? ¡Atención, porque no tiene desperdicio!
Robyn Rihanna Fenty nació el 20 de febrero de 1988 en la isla de Barbados. Creció en un bungalow junto a sus dos hermanos y sus padres y su infancia se vio muy marcada por la adicción de su padre al crack y al alcohol. Cuando ella tenía 14 años, sus padres decidieron seguir caminos diferentes.
Rihanna creció escuchando música reggae y en el año 2003 decidió crear un grupo de música con tres amigas de clase. En ese momento fue descubierta por un productor musical que no dudó en llevar su carrera. Al año siguiente, en el 2004, la joven ganó su primer concurso de talentos y en una audición en Nueva York conoció a Jay-Z, con quien grabó seis discos. Su primer sencillo, Umbrella, se proclamó como número uno en más de diez países.
En 2007, el look de Rihanna era muy diferente al de ahora. La cantante se presentó ante su público con una melena corta y asimétrica que fue evolucionando hasta un corte de pelo a lo ‘garçon’. Eso sí, con un toque desenfadado e irregular. Además, en la mayoría de ocasiones, Rihanna utilizaba distintos complemento en el pelo, como diademas o tiaras. También, su color de pelo era un poco ‘old school’ y decidió cambiarlo, decantándose por el color guinda, que no le quedaba nada mal con su tono de piel. En el año 2009, Rihanna comenzó a trabajar en su cuarto álbum de estudio, Rated R, y parece que también en su estilo.
Se puede decir que 2009 fue el año donde más cambió de look la cantante. Eso sí, el pelo corto seguía siendo el protagonista y lo único que cambiaba era el peinado y el color. Durante esa etapa de éxitos, la pudimos ver con tupé, melena alborotada y negra zaína. Luego, se decantó por el rubio oscuro, el moreno con cresta, las mechas rubias y rojo con flequillo. Cada vez que aparecía en una alfombra roja era toda una sorpresa; nunca sabías con qué look iba a sorprender. Al año siguiente, en el 2010, RiRi decidió darle un poco más de volumen a su melena y optó por unos rizos bien definidos en tupé y un color de pelo entre rubio y anaranjado.
En el verano de ese mismo año, Rihanna colaboró con el rapero Eminen, con quien grabó Love the Way You Lie, que también fue un bombazo. La canción alcanzó el número uno en más de veinte países y se convirtió en la quinta artista femenina con más números uno en el Hot 100. En noviembre, Rihanna lanzó su quinto álbum de estudio y su primer sencillo Only Girl (In the World) alcanzó el número uno en quince países. Al año siguiente, en el 2011, a Rihanna le dio por dar un cambio radical a su pelo, otra vez. Pudimos verla con una melena roja intensa que culminó con algunos tirabuzones. También, siguiendo con ese rojo, lució una melena totalmente ‘a lo afro’, coronada por una infinidad de rizos. En el 2012 volvió a cambiar de look y, en esa ocasión, se tiñó la melena de rubio pero dejándose las raíces negras al aire.
El rubio no le duró mucho tiempo porque al año siguiente se decantó por el negro en una media melena con flequillo abierto. En el 2013, Rihanna ganó su sexto Premio Grammy e hizo un cameo en la película This Is the End, dirigida por Seth Rogen y Evan Goldberg. El film se convirtió en todo un éxito, recaudando más de 30 millones de dólares en taquilla.
Y del negro al rosa hasta llegar a un look más natural. Fue en 2015 cuando pudimos ver a una Rihanna que se parece más a la de ahora. La cantante se decantó por una larga melena lisa y oscura, con la frente despejada. Pero hubo otro cambio radical: RiRi se volvió a cortar el pelo y se dejó flequillo hasta 2017, cuando volvió al ‘long hair’, aunque esta vez con un tono de pelo cobrizo y un estilo más alborotado y desenfadado.
Fue ese mismo año, 2017, cuando RiRi lanzó su primera marca de cosméticos, a la que llamó Fenty Beauty y cuyas sus ventas alcanzaron los 500 millones de euros. Durante todo este tiempo ha recibido una infinidad de elogios debido a su amplia variedad cromática, de productos y texturas. En la actualidad, Rihanna sigue con su larga melena negra y en algunas ocasiones podemos ver cómo se hace trenzas o se deja el pelo ondulado. Sea como sea, lo cierto es que RiRi sigue manteniendo su esencia.