Rosa López: "Cuando murió mi padre quise tirarlo todo por la borda"

Dos décadas han pasado desde que Rosa López tomara la decisión de formarse en la academia musical más famosa de la pequeña pantalla. Con el deseo de hacerse un hueco en el mundo de la música, la joven lograba conquistar a la audiencia con su ingenuidad, talento y corazón. Nada volvió a ser lo mismo para ella tras ganar el formato, pero tampoco lo fue para su entorno más cercano. Su padre, Eduardo López, muy unido a la niña de sus ojos, decidió abandonar su puesto de vigilante para centrarse en la trayectoria de la cantante, que vio hace trece años cómo su mundo se derrumbaba con su fallecimiento.

“Era mi vida entera. Yo le decía, cuando salí de OT, que habíamos cumplido el sueño de nuestras vidas. Porque que yo triunfara, también era su sueño”, señalaba en una reciente entrevista con la revista Semana, publicación en la que confesaba que sufría por él tras convertirse en un rostro conocido porque era una persona muy inocente: “A mí me daba terror que se le acercara un periodista. Él siempre cogía el teléfono, paraba su moto para atender a todos y le engañaban en la misma puerta de su casa”, recordaba indignada.

“Le decían cualquier tontería y al final resultaba que lo que querían era conseguir informaciones”, explicaba el método que empleaban algunos periodistas para ganarse la confianza de su progenitor, que les atendía siempre con respeto y amabilidad. “Ahora que él no está, recuerdo esas cosas y no me queda más remedio que cagarme en todo o recordarlo todo con mucho cariño. Mi padre me enseñó muchas cosas que me han servido para esta profesión, que emocionalmente es muy dura”, reconocía.

Eduardo fallecía un 24 de marzo de 2008, víctima de un cáncer de pulmón: “Quise tirarlo todo por la borda, pero al final resurges”, afirma Rosa, que en el aniversario de su muerte recordaba con pelos y señales cómo se enteró de su pérdida. “Me acosté y a las 4 de la mañana mi hermano me llama y me dice que papá está ya en otro lugar, que ya está en otro sitio”, comentaba emocionada en un directo mientras miraba algunas de sus fotografías. “Mi padre hizo que os adore más, que todavía ame más mi profesión”, reconocía a sus seguidores la de Peñuelas, que sigue conservando la “misma esencia” que aquella Rosa que encandiló a España en su paso por el programa de televisión.

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