El pasado de Can Yaman: el álbum familiar de la infancia del actor

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Nos encanta de mayor pero ya de pequeño era bastante achuchable. Y es que 'bebé Can' era puro amor. Simpático y alegre, tenía unos ojos muy vivos y nunca perdía la sonrisa. La misma que nos ha cautivado en 'Erkenci Kus' y 'Dolunay' y muy pronto lo hará en 'Dolunay''Inadina Ask: Amor obstinado' ya enamoraba a la cámara a finales de los años 80.

Tal y como nos ha mostrado su madre a través de su perfil de Instagram, en el que ejerce de mamá orgullosa y en el que ha compartido varias instantáneas de la infancia y la adolescencia del actor, Can tenía cara de niño bueno y 'tranquilote'. De esos que observan atentamente todo lo que ocurre en el mundo antes de lanzarse a la aventura.

El pequeño Can era de los niños que sonreía también con la mirada. Apenas se le veían los ojitos cuando empezaba a reír a carcajadas. Y es que el actor era tremendamente risueño. Y sí, ya tenía la sonrisa pícara que hemos visto en más de una ocasión y que ha vuelto loco a medio mundo.

Y sí, Can Yaman tampoco se libró. Como todo niño nacido y criado entre los 80 y los 90 llevó el pelo a tazón tan de moda en la época.

Y ese niño fue creciendo y se convirtió en un preadolescente que ya apuntaba maneras. Con solo 12 años ya tenía esa media sonrisa que nos ha vuelto locas y que seguramente ya causaba estragos entre las niñas de colegio. Estamos convencidos de que aún no le han olvidado. Nosotros no lo habríamos hecho.