¿Cuánto tiempo se tarda en fortalecer las caderas débiles?
Tener las caderas débiles afecta a la movilidad y causa dolores y molestias; La buena noticia es que se pueden fortalecer en un tiempo relativamente corto
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A la hora de cuidar nuestro cuerpo podemos afianzar hábitos que nos benefician de manera general, como hacer deporte, seguir una alimentación saludable o dormir entre 7 y 9 horas cada noche. Pero a media que cumplimos años, es posible que debamos fijarnos en partes concretas del cuerpo. Las caderas, por ejemplo, tienden a debilitarse y nos conviene fortalecerlas para garantizar una buena movilidad y, por supuesto, para evitar dolores. Si es tu caso, puedes lograr que adquieran fuerza con los ejercicios adecuados. Te contamos por qué se debilitan las caderas, qué puedes hacer para fortalecerlas y cuánto tiempo se tarda en ver los resultados.
¿Por qué se debilitan las caderas?
Las caderas pueden debilitarse por diferentes motivos. El paso de los años es una de las causas principales, sobre todo en personas sedentarias. Cuando envejecemos se produce una degeneración natural de los huesos y del cartílago, que puede retrasarse y reducirse con actividad física. Además, condiciones como la obesidad aumentan la presión sobre las articulaciones, al igual que los problemas congénitos relacionados con el desarrollo de las caderas, como la displasia, que tienden a agravarse con la edad.
La osteoporosis también está detrás de unas caderas débiles, y ya sabemos que el riesgo de padecerla aumenta con la menopausia. Del mismo modo, lesiones previas, sobreentrenamiento o falta de flexibilidad, pueden hacer que las caderas terminen por debilitarse.
Señales que indican debilidad en la cadera
Podemos pensar que no es fácil detectar el debilitamiento de cadera, pero la verdad es que hay señales que pueden ayudarnos a identificar que nuestros huesos y cartílagos están pidiendo fortalecerse:
- Incomodidad cuando estás sentada, con dolores que te hacen cambiar de postura o que prefieras apoyarte de un lado preferiblemente.
- Dificultad para levantarte: asociamos esta señal al paso de los años, y es cierto, pero generalmente porque tienes las caderas debilitadas y necesitas de un apoyo para ponerte de pie con cierta comodidad.
- Pierdes el equilibrio con facilidad, te cuesta a veces mantenerte estable o tienes propensión a las caídas.
- Dolor al hacer esfuerzos como subir escaleras o coger peso.
- Crujidos cuando haces movimientos con la cadera como el de cruzar las piernas.
- Dificultad para levantar las piernas, tanto si estás tumbada como de pie.
Cómo puedes fortalecer las caderas
Como en cualquier tema relacionado con la salud, no hay nada como ponerse en manos de un profesional. Un buen fisioterapeuta podrá determinar el nivel de debilidad de tus caderas y proponerte los ejercicios que necesitas para fortalecerlas que acelerará la recuperación. Además, es importante evitar el sedentarismo, y una de las mejores soluciones es caminar a diario, un ejercicio que para muchos puede parecer insuficiente, pero que ofrece muchos beneficios para la salud en general y, en concreto, para la musculatura de las caderas.
Si realizamos un entrenamiento de fuerza adaptado a nuestra condición física y necesidades, el cambio a mejor será significativo. Y no podemos olvidarnos de los malos hábitos posturales que arrastramos en el día a día y que es necesario corregir, porque es imprescindible una buena higiene postural para evitar el desgaste de las caderas y los dolores que lo acompañan.
Cuánto tiempo se tarda en fortalecer las caderas
Llegamos ya a lo que suele despertar nuestro interés, que es saber el tiempo que tardaremos en obtener resultados. Como ya puedes imaginar, ese tiempo va a depender del grado de debilitación de las caderas y de los hábitos que incorpores a tu vida para fortalecerlas: ejercicios específicos, fisioterapia, higiene postural… La constancia va a ser determinante también, pero contamos con que quieres sentir tus caderas fuertes para recuperar el máximo de movilidad, sentirte ágil y despedirte de los dolores.
En ese caso, la buena noticia es que en cuestión de unos días el dolor puede reducirse y a partir de las 4 semanas ya podrás notar cambios significativos, aunque una recuperación completa puede llevar hasta 3 meses (o hasta un año si hay una lesión grave). Y, por supuesto, hay que mantener los logros obtenidos, pero eso te va a resultar más sencillo una vez que aprecies la mejoría que has conseguido.
