Marta Pombo confiesa que se siente "mala madre": "Deseando borrar esta semana de mi cabeza"
La pasada semana, Marta Pombo y su hija María recibieron el alta y fue Candela la que se quedó ingresada en el hospital
La influencer y su marido, Luis Zamalloa, tienen la esperanza de que este lunes su hija reciba el alta tras poner fin al ciclo de tratamiento
La mediana de las hermanas Pombo ha confesado que se ha sentido "mala madre" esta semana por todo lo que ha ocurrido tras el nacimiento de sus mellizas
Ha sido una semana agridulce para la familia Pombo. Tras un buen embarazo y un parto de "cuento de hadas", según relató la propia Marta, una de sus hijas, Candela, tuvo que quedarse ingresada en la UCI horas después de su nacimiento. Las mellizas de la influencer nacieron de manera prematura y, aunque María estaba en perfecto estado, Candela tuvo complicaciones para respirar por sí misma. A lo largo de esta semana se ha quedado en la incubadora con un ciclo de tratamiento y cantidad de pruebas de las que ya han ido conociendo resultados.
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El pasado miércoles Marta y su hija María recibieron el alta y fue Candela quien tuvo que continuar ingresada en el hospital. La mediana de las hermanas Pombo, que ha ido actualizando las noticias sobre su hija a través de las redes, confesó que no se imaginaban lo "difícil" que había sido abandonar el hospital sin sus dos hijas.
Candela ya está fuera de la incubadora y a la espera de recibir el alta
Este domingo, Marta ha vuelto a actualizar el estado de salud de su hija. A través de su cuenta de Instagram, la influencer explicaba en la puerta del hospital que su energía "da para lo que da" y que Candela está "muy bien, monísima y fuera de la incubadora". La hermana de María Pombo contó que están esperando que acabe el ciclo de antibiótico y que, "supuestamente", le darían el alta este lunes. También ha confesado que está siendo "agotador emocionalmente" porque ve a su hija genial pero tiene que dejarla "solita" en la UCI. "Me siento fatal, impotente y triste", ha admitido.
Tras llegar a casa, en un rato de tranquilidad con su hija María en brazos, Marta se sinceró y confesó que tenía sentimiento de "mala madre". "Siento que no les estoy dedicando a Mati y a María el tiempo que necesitan", decía. Marta ha explicado que con María pasa más tiempo de calidad entre toma y toma, pero Mati, que tiene un año y medio, la busca y la echa de menos. "Me mata de la pena. Zama y yo somos muy buen equipo, está aquí todos los días con ellas jugando, haciendo todo lo que puede para que se note lo menos posible en casa esta situación. Estoy deseando borrar esta semana de mi cabeza, quedarme con lo bonito que fue el parto y borrar esta semana, empezar de cero como un parto normal", ha dicho la hermana de las Pombo, que espera este lunes poder instalarse en casa con su hija Candela y empezar, "de cero", su nueva vida como familia numerosa.